LIBROS DEL APOCALIPSIS 17 al 20
Condenación
de la gran ramera
Apocalipsis, 17:1 Vino
entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo
diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que
está sentada sobre muchas aguas; 17:2 con la cual han fornicado los reyes de la
tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su
fornicación. 17:3 Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer
sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía
siete cabezas y diez cuernos. 17:4 Y la mujer estaba vestida de púrpura y
escarlata, y adornada de oro de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la
mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su
fornicación; 17:5 y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA
GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA. 17:6 Vi a
la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de
Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.
La
gran ramera representa la Babilonia religiosa y abarca todas las religiones
falsas, incluido el cristianismo apostata. En la Biblia la prostitución y el
adulterio, cuando se emplean de manera figurada, por lo general denotan la
apostasía religiosa y la infidelidad a Dios (Isaías,
1:21, Jeremías, 3:9, Ezequiel, 16:14-18, 32, Santiago, 4:4) y
denotan una persona que profesa servir a Dios mientras que, en realidad, adora
y sirve a otros dioses. Nótese el agudo contraste entre la gran ramera y la
novia del Cordero (Apocalipsis, 19:7-8).
La ramera está sometida a Satanás. La novia está sometida a Cristo. Satanás
viste a una (Apocalipsis, 17:4). Dios viste a la otra (Apocalipsis,
19:8). La muerte eterna es la
porción de la ramera. La gloria eterna es lo que corresponde a la novia.
Respecto
a esta religión falsa:
[1]
La ramera rechazara el Evangelio de Cristo y los apóstoles, el poder de la
piedad y las doctrinas fundamentales del cristianismo (Mateo, 24:24, 2 Timoteo, 3:5, 4:3).
[2]
Ella se asociara con los poderes y la filosofía de "Babilonia", es decir, el sistema del mundo
con su inmoralidad (Apocalipsis, 17:2, 3:16).
Los poderes religiosos y políticos se unirán para tomar el control espiritual
sobre las naciones (Apocalipsis, 17:18).
[3]
Sus dirigentes perseguirán a los verdaderos seguidores de Cristo (Apocalipsis, 17:6). Ella será el crisol para
muchas creencias y credos y la doctrina no será de primera importancia. Su
principal interés será el compañerismo y la unidad con sus sistemas, valores y
objetos religiosos. Ella se convertirá en "habitación
de demonios y guarida de todo espíritu inmundo" (Apocalipsis, 18:2).
[4]
A todos los verdaderos creyentes se les ordena salir de ella o serán condenados
con ella (Apocalipsis, 18:4).
[5]
Dios hará que el anticristo la destruya (Apocalipsis,
17:16).
El
verdadero parentesco de la gran ramera no es con Cristo sino con el mundo.
[1]
Los hipócritas y los falsos profetas tienen éxito mundano como resultado de la
doctrina de ella, porque alienta a los mundanos a unirse a ella. Los falsos sistemas
religiosos permiten que sus adherentes profesen que son de Dios aunque, al mismo
tiempo, cometen adulterio.
[2]
Transigir con el poder político y tolerar la injusticia son su marca
distintiva. Como una ramera, la iglesia apostata vende su favor al mundo cuando
se le presenta la oportunidad (Apocalipsis, 18:3).
La
bestia escarlata sobre la cual está sentada esta ramera (Apocalipsis, 17:3), es el gobierno mundial o
la Babilonia política, la que apoya el poder espiritual apostata. La ramera
tiene en su mano una copa de oro llena de abominaciones pero hermosa por fuera,
lo cual revela la condición espiritual de la iglesia apostata de los últimos
días (Mateo, 23:27-28). La iglesia que mantiene el cáliz de oro ofrecerá
a las personas tanto las cosas de Dios como la satisfacción mundana, es decir,
un cristianismo pervertido que les asegura a sus miembros que pueden disfrutar
de la inmoralidad y todavía ser aceptados por Dios.
El
origen del nombre Babilonia es "Babel",
que simboliza la falsa religión, la hechicería, la astrología y la rebelión
contra Dios (Génesis, 10:8-10, 11:4, Isaías, 47:13).
La falsa religión, en conjunto con el sistema del mundo, perseguirá a todo el
que esté de veras consagrado a Cristo y a la fe bíblica.
Muchos
eruditos sostienen que esta mujer (esta ramera)
es la iglesia católica romana. Hay muchos indicios para pensar de esta forma.
Vamos
a ver cuáles son las diferencias entre la verdadera iglesia de Cristo y lo que
pretende ser una iglesia. La verdadera iglesia es presentada en la Biblia como
una virgen pura, sin mancha ni arruga. Una virgen gloriosa, que se prepara para
el encuentro con el Rey de Reyes. Sin embargo, existe una iglesia impostora,
una falsa iglesia, que no es la novia del Cordero, que no es la novia del Rey
de Reyes. Es, en cambio, la prostituta, la GRAN RAMERA que fornica con los
reyes de la Tierra. Qué diferencia!: una es la novia del Rey, la otra es la
PROSTITUTA de los reyes.
Mucha
gente que practica una religión babilónica, una religión tradicional y
costumbrista, va a descubrir, a la luz de la Biblia, que estuvo más que
engañada, y va derechito para la condenación.
BABILONIA:
¿a qué se refiere la Biblia?.
La
palabra BABILONIA se relaciona con toda confusión espiritual y religiosa. Ese
es el simbolismo de la palabra BABILONIA. En la Biblia, el nombre BABILONIA o
BABEL está relacionado íntimamente con varias cosas.
La
primera situación que aparece en la Biblia en relación con BABILONIA o con BABEL (que significa confusión), es, sin duda alguna,
la edificación de la TORRE DE BABEL.
En los días de un hombre llamado Nimrod, quien fue el primer poderoso de la
Tierra, este hombre sedujo a la humanidad, a la cual Dios le había dicho:
llenad la Tierra y sojuzgadla (la orden de Dios era poblar el mundo entero a lo
ancho y a lo largo). Sin embargo, los hombres escogieron desobedecer a Dios.
Nimrod
sedujo a la humanidad para que todos se juntaran en un único lugar para
construir una torre que llegara al cielo, desobedeciendo el mandato de Dios.
Este hombre rebelde fue llamado en la escritura Nimrod:
Génesis 10:8 Y
Cus engendró a Nimrod, quien llegó a ser el primer poderoso en la tierra. 10:9
Este fue vigoroso cazador delante de Jehová;
por lo cual se dice: Así como Nimrod, vigoroso cazador delante de Jehová.
“Vigoroso cazador
delante del Señor”, dice la Reina-Valera. En “oposición a Dios” dice la
escritura original. Nimrod: vigoroso cazador en contra de Dios.
Génesis, 11:2 Y
aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de
Sinar, y se establecieron allí. 11:3 Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos
ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y
el asfalto en lugar de mezcla. 11:4 Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad
y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si
fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra.
Hacerse
un nombre quiere decir hacerse fama “por si
fuéramos esparcidos sobre la faz de la Tierra”. Esta gente sabía
perfectamente que estaba desobedeciendo a Dios ya que, esparcirse sobre la faz
de la Tierra, era, precisamente, el mandato de Dios.
Génesis, 11:5 Y
descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los
hombres. 11:6 Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos estos tienen un
solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo
que han pensado hacer.
La
humanidad, en la época de BABEL, tuvo una sola virtud: la unidad. El problema
fue que se unieron contra Dios.
Génesis, 11:7 Ahora, pues, descendamos, y confundamos allí su
lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero.
La
palabra BABEL significa ‘Dios confunde’.
La
voluntad de Dios se ejecutó a la final, aunque el hombre se opuso.
Esta
situación de confusión, caos o anarquía religiosa y que se produjo en los días
de Nimrod, y que abarco el mundo entero, perjudico a la humanidad y se
convirtió, prácticamente, en la base de todas las religiones falsas del mundo.
No solo se confundieron los idiomas. Lo que ocurrió en la TORRE DE BABEL:
[1]
Origino todos los idiomas del mundo (antes de BABEL, se hablaba un solo idioma);
[2]
Provoco la dispersión de la humanidad a lo largo y a lo ancho de toda la Tierra
(finalmente se cumplió, como siempre, lo que había
ordenado Dios); y
[3]
Fue la cuna de todas las religiones falsas que hay en el mundo;
Toda
religión falsa tiene su origen babilónico, en la TORRE
DE BABEL: culto a lo creado y no al Creador.
La
palabra BABILONIA vuelve a aparecer, otra
vez, en la Biblia cuando se habla de un imperio. El famoso imperio que existió
en el año 586 a.C.. Este imperio babilónico fue comandado por el rey
Nabucodonosor, en la época del profeta Jeremías. Esta es la segunda vez que
aparece la palabra BABILONIA en la Biblia. Babilonia, el imperio que se desarrolló
en la Mesopotamia, también estaba en la tierra donde se había edificado la TORRE DE BABEL. La historia de Nabucodonosor (otro
hombre poderoso, como Nimrod) está escrita en la libro del profeta Daniel.
La
tercera vez que la palabra BABILONIA aparece
en la Biblia, tiene que ver con el futuro, y aparece en el libro de
Apocalipsis, capitulo 18, y es utilizada para describir lo que será el imperio
mundial del anticristo. Pero la palabra BABILONIA,
en Apocalipsis, describe también tres cosas más:
[1] BABILONIA es el nombre misterioso que le da
la Biblia a Roma;
[2] BABILONIA representa
todo culto idolátrico y pagano, diabólico en su creencia;
[3] BABILONIA representa el satanismo disfrazado de cristianismo
(mezcla de satanismo y algunas verdades de la Biblia, de lo cual surge un
sincretismo religioso);
El
imperio romano tiene una gran importancia cuando hablamos de BABILONIA. El imperio
romano de los cesares, era un pueblo politeísta (alababan
a muchos dioses). El mismo cesar, incluso, era considerado un dios y era
adorado como tal.
Realizaban
tremendos actos de paganismo y barbarie, en honor a sus dioses. Este imperio
romano, con el correr del tiempo, llego a ser la cabeza de una falsa iglesia,
de una falsa cristiandad: hablamos, por supuesto, de la iglesia católica
apostólica romana, que tiene una total relación con el imperio romano de los
cesares.
La
iglesia romana no es otra cosa que la mezcla del poder político y el poder
religioso. La fusión de la política y la religión no para servir a Dios, sino
para valerse de Dios y crear un súper imperio.
El
imperio romano desarrollo su marco histórico desde la península ibérica (España, Portugal), pasando por Italia, el
Peloponeso (Grecia), hasta el Medio Oriente,
y sometió a todos los pueblos de la región, incluido Israel. Con lo cual no se
puede hablar de Jesús, de Jesucristo el Hijo de Dios, sin hablar del imperio
romano. Porque Nuestro Señor vivió, murió y resucito en los días del imperio
romano. No se puede desligar la figura del Jesús bíblico y del Jesús histórico,
del imperio romano.
Jesús
nació durante el reinado de Augusto Cesar (que
gobernó desde 27 a.C. hasta 14 d.C.) y murió, resucito y ascendió a los
cielos durante el reinado de Tiberio Cesar (que
gobernó desde 14 d.C. hasta 37 d.C.). En ese tiempo Jesús funda la
iglesia (no creo una religión). La iglesia no es una organización. Son las
personas que viven para servir a Dios.
Pero
a esta iglesia que fundó Jesucristo no le fue nada fácil, porque el imperio
romano tenía ya demasiadas religiones enquistadas en su seno, muchas
religiones.
El
romano, era un pueblo politeísta, adoraban muchos dioses, tenían muchas
religiones y lo último que le podía pasar al imperio romano era que surja una
“nueva religión”, lo cual podría convertirse en autentica amenaza. Pero esto
fue lo que ocurrió. Había surgido una “nueva religión” (como lo veían ellos), una nueva amenaza llamada
“cristianismo”. Y surge en medio de uno de los pueblos que los romanos
dominaban y quisieron exterminar: el pueblo judío.
Es
así que el imperio romano, para paliar el efecto del surgimiento de esta “nueva
religión”, ordena las masacres más sanguinarias de la historia contra los
primeros discípulos de la iglesia fundada por Jesucristo. Nerón (emperador romano, quien gobernó en el periodo que va del
54 al 68 d.C.) surge en un momento en el que la iglesia estaba tomando
cuerpo y fue uno de los perseguidores más crueles de los primeros discípulos de
Jesús (de origen judío y de origen gentil).
Pero
no solamente fue Nerón quien persiguió a los cristianos. Después de él,
vinieron Diocleciano y Trajano, quienes también persiguieron cristianos.
Pasó
el tiempo y lo que consiguieron fue el efecto inverso: más cristianos mataban y
más gente se convertía. Reconocer que Jesús era el Señor (Kiryos, en griego), era un desafío al gobierno de
Roma, a la autoridad política del imperio, porque no podía haber dos Señores (recordemos que el Cesar, el emperador romano, sea quien
fuere, era adorado como un dios). Era desafiar directamente al cesar y
buscarse la muerte, irremediablemente.
Luego
apareció la figura de otro emperador romano: Constantino. Este hombre, que
también fue un perseguidor y masacrador de cristianos (al
igual que sus antecesores), cambio la historia de Roma. Constantino se
dio cuenta de algo, de lo que no se dieron cuenta sus antecesores: agarran a un
cristiano, lo llevan al circo romano, lo atan de pies y manos, le sueltan un
león y el cristiano lejos de desesperarse y blasfemar, comienza a alabar a su
Dios. Es así que mucha gente que estaba presenciando ese espectáculo, quedaba
conmovida ante semejante demostración de fe y de amor, y se convertían ahí
mismo.
Muchos
bajaban a la arena del circo romano, a acompañar a los cristianos y eran
devorados junto con ellos, demostrando con ese acto su conversión en el lugar
de los hechos. El circo romano no era un lugar donde un predicador predicara y
luego invitara a los presentes a “aceptar a
Cristo” y luego recogían una ofrenda.
La
ofrenda misma eran los cristianos. Con todo esto, se convirtieron al
cristianismo miles de personas y, en el afán de apagar la iglesia, la hicieron
crecer, para que se cumpla lo dicho por el mismísimo Mesías: que las puertas de infierno no prevalecerán contra la
iglesia y que ni la vida ni la muerte nos podrán separar el amor de Dios.
Cuando
Constantino vio que la iglesia de Jesucristo no paraba de crecer, a pesar de las
persecuciones y las matanzas, habilidosamente y como un gran estratega
político, dejo de perseguir a los cristianos y se “convirtió”
el también a ellos. Constantino, de la noche a la mañana, dejo de perseguir
cristianos y dijo: ahora, el que no se convierta al cristianismo, muere y
empezó a perseguir a los inconversos, ahora en nombre del cristianismo. El
resultado de esto fue que el imperio romano, casi en su totalidad, se convirtió
al cristianismo.
Pero
no a un cristianismo verdadero en el que los hombres nacen de nuevo al aceptar
a Jesucristo como su Señor y Salvador. No al cristianismo que nace del corazón,
cuando el Espíritu Santo redarguye de pecado, justicia y juicio. Este
cristianismo falso y mentiroso fue creado no por el Espíritu Santo ni por Dios,
sino por un emperador ambicioso que no quería que el imperio se le divida. La
gente se convierte al cristianismo en Roma, por imposición, no por conversión
del Espíritu Santo. Ahora, los perseguidores se habían convertido en
perseguidos.
Pero
Constantino va más allá y dice: ahora yo soy cristiano, me he bautizado y no
solamente soy emperador romano sino que, además, voy a ser el líder de esta
iglesia, fusionando, de esta manera, la política con la religión, creando lo
que la historia ha llamado el sacrosanto imperio romano (una obra de hombres y de Satanás y no del Espíritu Santo).
Constantino,
en suma, creo una institución poderosísima que, hasta el día de hoy, sigue
andando en la historia y que tiene su centro en Roma: el VATICANO. Constantino, además de ser emperador, se convirtió
en el líder de una supuesta iglesia cristiana, de una supuesta novia del
Cordero y no hizo otra cosa que crear un verdadero monstruo llamado iglesia
católica apostólica romana.
Pablo
presenta en sus epístolas (en sus cartas),
a la verdadera iglesia como una VIRGEN PURA.
Una iglesia gloriosa, sin mancha ni arruga, que se prepara para estar en las
bodas del Cordero, con el Rey. Esta es la novia del Rey: la verdadera iglesia.
Pero esta otra iglesia impostora, es una PROSTITUTA
que fornica con los reyes de este mundo.
Vaya
usted a donde vaya, América, Europa o el resto del mundo, notara que, cerca del
palacio o casa de gobierno, está la catedral (cerca
del poder político de turno). El poder religioso fornicando con el
poder político.
A
esta mujer, se la describe como a una PROSTITUTA
seductora, que embriago a los reyes de la tierra y sedujo a las naciones en pos
de si, extraviándolas espiritualmente (obro como
obra toda prostituta seductora).
Esta mujer
utiliza vino y un cáliz de oro y esta vestida de purpura y
escarlata.
¿Qué
nombre tiene esta ramera?. BABILONIA (que significa
“confusión”) LA GRANDE (no cualquier
cosa: la jefa de las jefas), LA MADRE DE LAS PROSTITUTAS Y DE LAS
ABOMINACIONES DE LA TIERRA.
La
falsa cristiandad, que tiene su centro en Roma, se llama así: SANTA MADRE IGLESIA CATOLICA, APOSTOLICA Y ROMANA.
Ella dice de sí misma que es una SANTA MADRE pero el libro de Apocalipsis dice otra cosa: que es
MADRE pero no santa sino que es una PROSTITUTA
(LA MADRE DE LAS
PROSTITUTAS).
¿Qué
abominaciones comete esta falsa iglesia, esta PROSTITUTA espiritual?. Una de
las mayores abominaciones de esta RAMERA, es presentar una “falsa trinidad” al mundo.
Roma
tiene su “propia trinidad”.
A
su líder lo llaman PAPA, palabra que viene del arameo ‘Abba’, que significa Padre y se refiere (y solo está reservada) a
Dios.
Mateo, 23:9 Y
no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el
que está en los cielos.
Mal
entonces el líder de Roma puede arrogarse el nombre de Padre (nombre reservado a Dios),
siendo humano.
El
líder romano no solo se cree Dios Padre. También se cree Dios Hijo. ¿Por qué?. Porque
el PAPA, además, se hace llamar ‘sumo pontífice’,
que significa ‘sumo sacerdote’,
cuando la Biblia dice claramente que el Sumo Sacerdote es nuestro Señor
Jesucristo.
Hebreos, 4:14 Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que
traspaso los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión.
Pero
el líder romano, el PAPA, no solo se cree Dios Padre y Dios Hijo. También se cree el Espíritu
Santo, porque el líder romano se presenta a sí mismo como el “Vicarius Figli Dei”, el
vicario del Hijo de Dios, el representante de Jesucristo. ¿Quién dijo que
Jesucristo dejaría un representante humano en la tierra?.
Juan, 14:26 Mas
el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os
enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.
El
representante de Jesucristo es el Espíritu Santo (“a quien el Padre enviara en mi nombre”) y no el Papa de Roma.
Otra
de las abominaciones de esta RAMERA o PROSTITUA
ESPIRITUAL es la afirmación de
que Pedro fue el “Primer Papa”. Una mentira
que se repite tantas veces, termina transformándose en “una verdad”. Pero Pedro
murió sin enterarse de que lo habían nombrado “Papa”.
Otra descontextualización de los pasajes bíblicos perpetrada por la iglesia
romana. Es más, Pedro no reunía ni siquiera los requisitos para ser Papa. Uno
de esos requisitos es ser soltero. Pero Pedro tenía suegra. Pedro era casado y,
según la iglesia romana, solo un hombre que haga voto de castidad puede ser
líder religioso. Pedro no cumple los requisitos del mismo Vaticano.
Pero
además, el voto de castidad impuesto es un pecado y una doctrina de demonios.
1 Timoteo,
4:1 Pero
el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de
la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; 4:2 por la
hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, 4:3 prohibirán
casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción
de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la
verdad.
O sea que el celibato impuesto
es una doctrina de demonios.
Otra
de las abominaciones cometida por esta ramera es la descontextualización
descarada de los siguientes pasajes:
Mateo, 16:15 Él
les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? 16:16 Respondiendo Simón Pedro,
dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. 16:17 Entonces le respondió
Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne
ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. 16:18 Y yo también te digo,
que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia;
¿Pero cuál es la roca de la cual se está
hablando acá?. ¿Pedro?. No. Jesús
jamás endioso a Pedro (que, dicho sea de paso, luego lo negó tres veces).
¿Pero cuál es la roca sobre la cual se
edificaría la Iglesia de Cristo?. La roca es la declaración que salió de
los labios de Pedro: que Jesús es el Cristo,
el Hijo de Dios. Esta es la roca y es el fundamento
de la Iglesia de Dios. No Pedro sino lo que Pedro acababa de decir y que
le había sido revelado por el Padre. Lo que había dicho Pedro no le fue
revelado por ningún filósofo ni teólogo romano sino por el mismísimo Dios y
esta revelación es la roca. No Pedro sino lo que Pedro dijo por revelación del
Padre. Esta es una de las mayores tergiversaciones que ha hecho la iglesia
romana de los pasajes bíblicos.
Preguntémosle
a Pedro que creía él:
1 Pedro, 2:4 Acercándoos
a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, más para Dios
escogida y preciosa,
Isaías, 28:16 por
tanto, Jehová el Señor dice así: He aquí que yo he puesto en Sion por
fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable;
el que creyere, no se apresure.
Salmos,
118:22 La piedra que desecharon los edificadores Ha venido a ser cabeza del
ángulo.
Isaías, 8:14 Entonces
él será por santuario; pero a las dos casas de Israel, por piedra para tropezar,
y por tropezadero para caer, y por lazo y por red al morador de Jerusalén. 8:15
Y muchos tropezarán entre ellos, y caerán, y serán quebrantados; y se enredarán
y serán apresados.
Ahora
preguntémosle a Pablo:
1 Corintios,
10:4 y
todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual
que los seguía, y la roca era Cristo.
Esta
iglesia romana, esta RAMERA,
no solamente:
[a] Esta
vestida de purpura y escarlata;
[b] Utiliza
un cáliz de oro, con vino;
[c] Está
llena de oro y perlas preciosas;
[d] Es una
ciudad sentada sobre siete montes (ya
veremos qué significa esto según Apocalipsis,
17:9); y
[e]
Tergiversa alevosamente muchísimos pasajes bíblicos; etc., etc., etc.
Es
además LA MADRE DE TODAS
LAS RAMERAS, porque es la madre de todas las creencias cristianas
falsas. Quizás, el caso más emblemático sea el de la Iglesia Anglicana, que
nació en 1536, cuando Enrique VIII solicitó a Clemente VII (Papa Romano) que
declarara nulo su matrimonio con Catalina de Aragón. Al ser rechazado el pedido
por el Papa, el monarca decidió emancipar a la Iglesia de Inglaterra de la
Iglesia Católica Romana y se autoproclamó Jefe Supremo de la Iglesia de
Inglaterra.
Muchos
de los que se opusieron a la política religiosa de Enrique VIII fueron
depuestos de sus cargos y algunos torturados y ejecutados, entre los cuales
cabe destacar el caso de Tomas Moro. Tras el relativamente breve reinado de
Eduardo VI y el período de restauración católica encabezado por la reina María
I, la Reforma Anglicana se consolidó definitivamente durante el reinado de
Isabel I.
Si, como lo
has leído: la iglesia anglicana
nace por un capricho de un rey que, luego de mandar a asesinar a cada esposa
con la que se casaba, contraía matrimonio nuevamente con alguna otra
desdichada, que luego corría la misma suerte.
Pero,
además de todo esto, la iglesia romana, a lo largo de la historia, es culpable
de la tortura y masacre de millones de nuestros hermanos, en lo que
históricamente se ha conocido como la Inquisición, hermanos que eran tildados
de “herejes”. ¿Quiénes eran mayormente
estos herejes?. Los que no se sometían al Papa Romano: los
protestantes. Los masacraron a “punta de cruz”.
No
podemos, tampoco, olvidarnos de las famosas “Cruzadas”, epopeya
sangrienta llevada a cabo por los “caballeros cruzados”: una caballería
militar laica, que fue una institución ideada por la intelectualidad de esta
iglesia romana, con el objetivo aparente de ir a buscar el “Santo Sepulcro”
para apresurar “la venida del Reino de
Dios”, pero con el verdadero objetivo de invadir Medio Oriente matando,
saqueando, violando y mutilando todo a su paso.
Formaron
parte de estas Cruzadas no solo los anteriormente mencionados caballeros
militares laicos sino también la peor lacra de la sociedad de ese momento:
violadores, asesinos, ladrones, piratas, mercenarios, prostitutas y clérigos
caídos o en ruptura.
Y
esta es la sangre derramada que le será demandada a esta RAMERA, cuando
sobrevenga su destrucción:
Apocalipsis,
17:6 Vi
a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de
Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.
Este
pasaje bíblico dice que la mujer estaba ebria de la sangre de los santos, no
dice que estuviera manchada de la sangre de los santos. Esta mujer no se manchó
de la sangre: se la bebió. Le dio vino (el vino
de su fornicación) a la naciones, a los reyes de la tierra, para que
estos a su vez mataran (estos son los que sí están
manchados de sangre). Pero esta RAMERA se la bebió.
Al concluir
los juicios de las copas de la ira de Dios, llegamos al final de la gran
tribulación. Pero ahora nos volvemos
un poco para conocer los detalles de la destrucción de Babilonia. ¿Recuerdan ustedes el versículo de Apocalipsis 16:19? “Y la gran
Babilonia vino en memoria delante de Dios, para darle el cáliz del vino del
ardor de su ira”. Pues bien, los capítulos
17 y 18 nos dan ese detalle golpe
por golpe. Casi desde el inicio del tiempo, la historia del hombre sobre la
Tierra ha sido la Historia de Dos Ciudades, Babilonia la ciudad del hombre, y
Jerusalén la Ciudad de Dios. Entonces, no es ninguna coincidencia de que en los
días finales de la Era del Hombre, veamos la batalla que involucra a estas dos
ciudades.
Como
lo mencioné anteriormente, existen tres facetas en el sistema mundial
babilónico las cuales han esclavizado a la humanidad en todas las épocas, y
estas son:
[1] la
religiosa;
[2] la
comercial; y
[3] la
gubernamental.
Trataremos
primero con la religiosa, la cual es caracterizada por la mujer.
Una
mujer identificada como un misterio, Babilonia, la madre de las rameras, está
montada sobre una bestia. El jinete siempre controla al animal, y la tercera
mención de siete cabezas y diez cuernos indica que esa es la misma bestia que
salió del mar en Apocalipsis 13, la
cual recibe el poder de Satanás, el dragón de Apocalipsis
12. Esto nos indica que el anticristo inicialmente obtendrá su poder
por medio de su asociación con la religión. La mujer y la bestia no son las
mismas, pero por un tiempo parecerán estar ligadas una con la otra. La mujer
siendo el jinete, al principio será el socio dominante. Pero como Apocalipsis 17:16 nos
dice, el anticristo y sus socios realmente van a odiar a la mujer, y actuando
bajo las órdenes de Dios la destruirán. Hablaremos más sobre ella un poco más
adelante.
Habiendo
luchado durante la mayor parte del siglo pasado para despojarse de su relación
con el único y verdadero Dios, el hombre abrazará a esta religión falsa.
Hablando acerca del anticristo y su religión falsa, Jesús dijo, “Yo he venido en
nombre de mi Padre, y ustedes no me reciben; si otro viniere en su propio
nombre, a ése recibirán” (Juan
5:43).
A
esta mujer se le llama “un misterio, Babilonia” porque ella no es
Babilonia, como pronto lo veremos. Pero la religión babilónica es literalmente
la madre de todos los cultos y mitologías que se han formado en oposición al
Evangelio.
Brevemente,
en tiempos de Génesis 10, cuando Nimrod fundó Babilonia, su esposa Semiramis
sembró las primeras semillas de la falsa religión al haber afirmado que su hijo
Tamuz era el hijo sobrenatural del dios Sol, falsificando la promesa
primeramente dada por Dios en el Jardín del Edén de que la simiente de la mujer
redimiría a la humanidad.
Según
la tradición, cuando Tamuz murió en un accidente de cacería, ella entró en un
período de duelo de 40 días. Cerca del final de este tiempo, ella quemó un leño
(“yule” que en el idioma babilónico significa
niño), conforme el sol lentamente se ocultaba (moría). Después de la
noche más larga del año, el solsticio de invierno, Tamuz volvió a la vida,
siendo ésta la primera resurrección falsa del mundo.
En
señal de regocijo ella decoró un árbol siempre verde (árbol de navidad), que es un símbolo de
vida, y sirvió pastelitos con las iniciales de su hijo para conmemorar el
evento. Hoy le llamamos a estos pastelitos “panes calientes en cruz”, puesto que la “T” babilónica se parece
a la “X” de nuestro
idioma. Y como si fuera para validar esta celebración, el sol comenzaba a
retornar a la vida también.
Luego
ella conmemoró los 40 días de duelo (que ahora les llamamos Cuaresma), formando un sacerdocio célibe
para que guiara a las personas en la adoración de su hijo resucitado. Declaró
al sumo sacerdote infalible y ella se proclamó como la Reina del Cielo.
Lo
que sigue, es mi opinión y no del ensayista bíblico arriba citado (Jack
Kelley):
Si
hay una religión, actual, que se caracteriza por:
[a] la cuaresma;
[b] el
sacerdocio célibe; y
[c] por
llamar Reina del Cielo a la Virgen María;
Es
la IGLESIA CATOLICA
APOSTOLICA ROMANA (la cual está
plagada de un sin número de ritos y mitos de origen babilónico).
Todas
las mitologías que surgieron desde ese entonces, han incluido algunos elementos
de esta historia. En la versión egipcia a ella se le conoció como Isis; en neo
Babilonia como Astoret, o Istar; en Canaán como Astarté; en Grecia como
Afrodita, y en Roma como Venus. A ella también se le llama la diosa del amor y
de la fertilidad. Su objetivo principal siempre ha sido usurpar el papel de
Dios como el único Dador y Sostenedor de Vida. (Algunas tradiciones sostienen que lejos de ser la Virgen del Mar, como
una vez ella se llamó a sí misma, Semiramis fue la matrona de un burdel cuando
conoció a Nimrod la primera vez. Si eso es así, ella realmente sería la “madre
de las rameras”).
Apocalipsis,
17:7 Y
el ángel me dijo: ¿Por qué te asombras? Yo te diré el misterio de la mujer, y
de la bestia que la trae, la cual tiene las siete cabezas y los diez cuernos.
17:8 La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a
perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están
escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán
viendo la bestia que era y no es, y será.
Apocalipsis,
17:7 Y el ángel me dijo: ¿Por qué te
asombras? Yo te diré el misterio de la mujer, y de la bestia que la
trae, la cual tiene las siete cabezas y los diez cuernos.
El
misterio de la mujer y de la bestia que la trae. Esto significa que la iglesia católica, y el sistema religioso corrupto
que profesa, se va a parapetar sobre el imperio del anticristo. Se van a aliar.
Como siempre, la iglesia romana prostituyéndose con los reyes de la tierra y va
a intentar hacer lo mismo con el anticristo.
Apocalipsis,
17:8 La
bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a
perdición;
Algunos
interpretan este pasaje como si quisiera decir que el anticristo es una persona
que una vez existió en la historia pero que ahora está muerto y, en un futuro
que aún no ha llegado, saldrá del abismo, permanecerá en la tierra por un
periodo de tiempo y luego será destruido (Apocalipsis,
17:8-11, 19:20).
La
“abominación desoladora” de la que
hablo el profeta Daniel que menciono Jesucristo en Mateo,
24:15, se refiere al anticristo de los últimos tiempos. Pero la “abominación desoladora de la que hablo el
profeta Daniel” también se aplica a un personaje histórico de la
antigüedad, quien profano el (segundo)
templo de Jerusalén.
En
el libro de Daniel, el ángel Gabriel le da al profeta Daniel la siguiente
profecía:
Daniel, 8:3 Alcé
los ojos y miré, y he aquí un carnero que estaba delante del río, y tenía dos
cuernos; y aunque los cuernos eran altos, uno era más alto que el otro; y el
más alto creció después. 8:4 Vi que el carnero hería con los cuernos al
poniente, al norte y al sur, y que ninguna bestia podía parar delante de él, ni
había quien escapase de su poder; y hacía conforme a su voluntad, y se
engrandecía. 8:5 Mientras yo consideraba esto, he aquí un macho cabrío
venía del lado del poniente sobre la faz de toda la tierra, sin tocar tierra; y
aquel macho cabrío tenía un cuerno notable entre sus ojos. 8:6 Y vino
hasta el carnero de dos cuernos, que yo había visto en la ribera del río, y
corrió contra él con la furia de su fuerza. 8:7 Y lo vi que llegó junto al
carnero, y se levantó contra él y lo hirió, y le quebró sus dos cuernos, y el
carnero no tenía fuerzas para pararse delante de él; lo derribó, por tanto, en
tierra, y lo pisoteó, y no hubo quien librase al carnero de su poder. 8:8
Y el macho cabrío se engrandeció sobremanera; pero estando en su mayor fuerza,
aquel gran cuerno fue quebrado, y en su lugar salieron otros cuatro cuernos
notables hacia los cuatro vientos del cielo. 8:9 Y de uno de ellos salió
un cuerno pequeño, que creció mucho al sur, y al oriente, y hacia la tierra
gloriosa.
Luego,
el ángel Gabriel le da a Daniel la interpretación de esta visión profética:
Daniel, 8:16 Y
oí una voz de hombre entre las riberas del Ulai, que gritó y dijo: Gabriel,
enseña a éste la visión. 8:17 Vino luego cerca de donde yo estaba; y con
su venida me asombré, y me postré sobre mi rostro. Pero él me dijo: Entiende,
hijo de hombre, porque la visión es para el tiempo del fin. 8:18 Mientras
él hablaba conmigo, caí dormido en tierra sobre mi rostro; y él me tocó, y me
hizo estar en pie. 8 :19Y dijo: He aquí yo te enseñaré lo que ha de venir
al fin de la ira; porque eso es para el tiempo del fin. 8:20 En cuanto al
carnero que viste, que tenía dos cuernos, éstos son los reyes de Media y de
Persia. 8:21 El macho cabrío es el rey de Grecia, y el cuerno grande que
tenía entre sus ojos es el rey primero. 8:22 Y en cuanto al cuerno que fue
quebrado, y sucedieron cuatro en su lugar, significa que cuatro reinos se
levantarán de esa nación, aunque no con la fuerza de él. 8:23 Y al fin del
reinado de éstos, cuando los transgresores lleguen al colmo, se levantará un
rey altivo de rostro y entendido en enigmas.
La
profecía habla de un “carnero”
que tenía dos cuernos: estos son los reyes de Media y de Persia, le dice el
ángel Gabriel a Daniel. La profecía habla también de que este carnero fue
vencido por un “macho cabrío”,
que tenía un cuerno notable entre sus ojos. El propio ángel Gabriel le aclara a
Daniel que el “macho
cabrío” es el rey de Grecia (el imperio griego) y que el “cuerno grande” que tenía entre sus ojos es “el
rey primero” (Alejandro Magno).
La
profecía también dice que el macho cabrío (el imperio griego comandado por Alejandro) se
engrandeció sobremanera pero que, estando en su mayor fuerza, el “gran cuerno”
fue quebrado (Alejandro Magno murió cuando estaba
en su apogeo). La profecía también dice que del “gran cuerno quebrado” (de Alejandro
Magno) salieron, a su vez, otros 4 cuernos notables (otros 4 reyes) y que de uno de los cuernos (de uno
de esos 4 reyes) salió un cuerno pequeño (otro rey menor) que creció mucho al sur y al
oriente y “hacia la tierra gloriosa”
(hacia Jerusalén).
El
ángel Gabriel le dice a Daniel que los 4 cuernos que salieron del cuerno
quebrado son cuatro reinos (reyes), que no iban a tener la fuerza del
cuerno quebrado (4 reyes que no iban a
ser tan poderosos como Alejandro Magno). Del gran cuerno quebrado
(Alejandro Magno), saldrían 4 reyes y de uno de esos reyes saldría un rey que
marcharía hacia Jerusalén y profanaría el templo. El profeta Daniel, que vivió
durante el apogeo del imperio babilónico (al
mando de Nabucodonosor quien, a su vez, fue sucedido por su hijo Belsasar)
y que vivió también la caída y dominación del imperio babilónico a manos del
imperio medo-persa, no vio, sin embargo, el cumplimiento de esta profecía (la caída, a su
vez, del imperio medo-persa a manos del imperio griego comandado por Alejandro
y la profanación del templo de Jerusalén por un rey descendiente de uno de los
4 reyes que sucedería a Alejandro tras su muerte).
Los
Macabeos fueron una familia numerosa judía, que tomaron las armas contra los
griegos. Y ellos ganaron muchos adeptos. De aquí surgieron los “zelotes”, que
representaron la resistencia armada judía durante la época de la dominación
romana (Barrabas era
“zelote”). El imperio griego fue enfrentado por una minoría judía: los Macabeos.
¿Qué
ocurrió en los días de los Macabeos?.
Tras
la muerte de Alejandro Magno, cuatro de sus generales, tomaron el reino:
Lisímaco, Seleuco, Ptolomeo y Casandro. Uno gobernó Siria, otro Egipto, otro
Arabia y otro Israel. Y de Siria (gobernada por Seleuco, quien fundo la
dinastía seleucida) salió Antíoco Epifano o Antíoco VI, que profano el
templo de Israel, levantando una imagen de Zeus dentro del mismo y sacrificando
un cerdo en el altar (esta es la “abominación desoladora” de la que hablo el
profeta Daniel).
En
167 a.C., Antíoco IV organizó una expedición contra Jerusalén, la cual
saqueó. Según el Libro de los Macabeos, promulgó varias ordenanzas de tipo
religioso: trató de suprimir el culto a Jehová, prohibió el judaísmo,
suspendiendo toda clase de manifestación religiosa, mandó que se comieran
alimentos considerados impuros y trató de establecer el culto a los dioses
griegos. Pero el sacerdote judío Matatías y sus dos hijos llamados
Macabeos consiguieron levantar a la población en su contra y lo expulsaron.
Cuando
la ciudad de Jerusalén estaba sitiada ocurrió un milagro impresionante, que dio
origen a una de las fiestas más importantes de la nación de Israel. El (segundo) templo vivió uno
de sus días más difíciles. La “Menorah” es el conocido candelabro de 7 brazos
que Dios había ordenado construir a Moisés y que se encontraba en el templo.
Este candelabro tenía que permanecer encendido de día y de noche (no podía apagarse nunca).
Lo
que hacía arder a este candelabro era aceite de oliva. Pero la ciudad de
Jerusalén se encontraba sitiada (rodeada)
por los griegos y no había manera de conseguir más aceite, con lo
cual este candelabro amenazaba con apagarse, motivo por el cual los sacerdotes
judíos estaban desesperados.
Cuenta
la historia que uno de los levitas, en unos pasadizos secretos del templo,
encontró milagrosamente una botella, sin abrir, que contenía aceite de oliva.
Este levita corrió entonces al sumo sacerdote y le mostro la botella que había
encontrado, con el aceite de oliva para hacer arder el candelabro.
La
porción encontrada de aceite de oliva en la botella alcanzaba solo para un día,
pero, milagrosamente,
alcanzo para hacer arder el candelabro durante 8 días. Por eso también hay un
candelabro que tiene 9 brazos, con 9 velas y es el candelabro de “janukah”. “Janukah” es el nombre de una fiesta
que también se la conoce como la fiesta de las luces o de la dedicación,
recordando la gesta de los Macabeos. ¿Porque
tiene 9 velas este candelabro?. Porque con una vela se van
encendiendo las otras 8, porque el milagro duro 8 días.
Al
final de los 8 días Israel venció a los griegos. Un
milagro de Dios, un milagro de sobrevivencia. Los judíos tuvieron
que desarmar el altar, donde se había sacrificado el cerdo, y construir un
nuevo altar. Por eso a la fiesta de “Janukah” también se la llama “la fiesta de la dedicación”, porque tuvieron
que re-dedicar el altar nuevamente a Dios. Sacar las piedras y colocar nuevas
piedras y hacer nuevos sacrificios en el nuevo altar. En esta fiesta de
“Janukah”, el candelabro de 9 velas no se enciende todo de golpe, sino que se
enciende una vela por noche.
Recién
en la octava noche el candelabro arde completo. Si Israel no hubiese vencido en
la gesta de los Macabeos, Jesucristo no hubiese nacido, porque lo que pretendían
los griegos (impulsados por Satanás, claro está) era exterminar al pueblo
judío, a la nación de Israel, para que precisamente el Mesías no venga. Tal es
la relevancia histórica de la fiesta del “Janukah”.
¿Jesucristo
celebro la fiesta de Janukah?.
Juan, 10:22 Celebrábase en Jerusalén la fiesta de la dedicación.
Era invierno, 10:23 y Jesús andaba en el templo por el pórtico de Salomón. 10:24 Y le rodearon los judíos
y le dijeron: Hasta cuándo nos turbarás el alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo
abiertamente. 10:25 Jesús les respondió: Os lo he dicho, y no creéis;
El
versículo anterior dice que “celebrábase en Jerusalén la fiesta de la
dedicación”. La dedicación del templo, sin dudas la fiesta de “Janukah”.
Era invierno, dice el versículo. Esto es a mediados de diciembre, que es cuando
los judíos celebran la fiesta de “Janukah”. Esta fiesta es tan
importante que el mismísimo Mesías la vivió en sus días.
Lo
que hizo, en definitiva, Jesucristo en Mateo,
24:15 es tomar la profecía de
Daniel y decir: ojo que esto que profetizo Daniel y que ya paso, hacia el final
de los tiempos va a volver a pasar (van a volver a profanar el templo).
Los
moradores de la tierra se asombrarán al ver a la bestia porque ella era, ya no
es, y va a venir. La palabra griega traducida asombrarán significa maravillarse o admirarse.
Algunas personas creen que la frase era, y no es; y está para subir significa
que el anticristo será una figura del pasado, alguien que ha vivido antes del
tiempo de Juan, que estaba muerto cuando Juan escribió el libro de Apocalipsis,
pero que va a regresar al final de la Era como el anticristo. Los candidatos
más populares son Antíoco Epífanes quien murió en el año 163 a.C., el emperador
romano Nerón quien murió en el 68 d.C., y Judas Iscariote quien murió en el 32
d.C..
Antíoco
Epífanes y Nerón son dos de los modelos históricos más específicos del
anticristo, y Jesús le llamó a Judas el hijo de perdición (Juan 17:12) que es el mismo título con el que
Pablo se refiere al anticristo (2 Tesalonicenses
2:3).
Juan, 17:12 Cuando
estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste,
yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para
que la Escritura se cumpliese.
2 Tesalonicenses,
2:3 Nadie os engañe en
ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se
manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición,
Apocalipsis,
17:9 Esto,
para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes, sobre
los cuales se sienta la mujer, 17:10 y son siete reyes. Cinco de ellos han caído; uno
es, y el otro aún no ha venido; y cuando venga, es necesario que dure breve
tiempo. 17:11 La bestia que era, y no es, es
también el octavo; y es de entre los siete, y va a la perdición.
Algunos
creen que los siete reyes representan siete reinos seculares (históricos) del
mundo. Los cinco reinos caídos probablemente sean Egipto, Asiria, Babilonia,
Medo-Persia y Grecia.
La
frase "uno es" significa que, al
momento en que Juan estaba escribiendo el libro de Apocalipsis, había un
imperio vigente y era el imperio romano. El otro imperio que aún no había
venido al momento en que Juan escribía el libro son los estados nacionalistas
europeos (que perduran hasta hoy) que
surgieron del imperio romano caído, simbolizado por los pies de hierro mezclado
con arcilla de la estatua que soñó el rey Nabucodonosor (Daniel, 2). El siguiente reino, el octavo será
el del anticristo, quien será la cabeza del último imperio mundial. El "es de los siete" pero también es "el octavo", lo cual pudiera significar
que pertenece al mismo sistema mundial impío de los primeros siete, aunque no
pertenece a su grupo.
Apocalipsis,
17:9 Esto,
para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes, sobre
los cuales se sienta la mujer,
En
Apocalipsis, 17:18 se nos dice que la
mujer que está sentada sobre la bestia es "la
gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra". Esta ciudad es el Vaticano, que influye
espiritualmente en gran parte del mundo y lo arrastra a la idolatría. La
iglesia romana gobierna sobre las naciones. Todo presidente, ni bien asume,
tiene que ir al Vaticano, postrarse delante del Papa y besarle el anillo.
Si
usted tiene al Espíritu Santo, entonces tiene sabiduría para entender lo que
sigue (para la mente que tenga sabiduría,
dice el versículo): esta MUJER/CIUDAD se encuentra (se sienta)
sobre siete montes o
colinas: Palatino, Capitolino, Quirinal, Viminal, Esquilino, Coeliano y Aventino.
¿Qué ciudad se
encuentra rodeada de siete montes o colinas?. Sin dudas la ciudad de Roma. Es más, su primer nombre en la
historia fue “septimontum”
que, en latín, significa las siete colinas o los siete montes (no se la llamaba Roma). Luego cambio de
nombre y se la llamo “Romiti” que significa “fortaleza,
poderosa o invencible”. Luego vino la fábula de Rómulo y Remo, dos
niños que quedaron huérfanos y fueron amamantados por un loba y después
fundaron Roma (pero esto ya es una fábula, no historia).
Y
el Vaticano se halla en la cúspide del monte Aventino.
Pero
¿qué significa la palabra Vaticano?.
Proviene del latín y es la suma de dos raíces, de dos palabras: “vate” (que significa lugar) y “canus” (que significa adivinación). O sea que la
palabra Vaticano puede ser traducida como “lugar de adivinación” (lugar de hechicería, más puntualmente). De
hecho, la palabra “vaticinar” se refiere a la predicción de un hecho
futuro. Algo así como el “monte de la adivinación”.
Pero
hay algo más grave: mucho antes de que Jesucristo naciera, los romanos, en ese
lugar, en la cúspide del monte Aventino, hacían todo tipo de rituales y
adoraban a dioses paganos. Y celebraban la fiesta del dios Saturno, conocida
como la “saturnalia romana”, que comenzaba
el 18 de diciembre y terminaba el 25 de diciembre, cuando nacía el dios sol (solsticio).
El
25 de diciembre hacían tremendas orgias debajo de árboles frondosos. ¿Y que se
festeja el 25 de diciembre?.....
¿Y qué hizo Constantino con esta
costumbre?. La cristianizo. Ahora, el 25 de diciembre, ya no es el
cumpleaños del dios Saturno. Ahora es Jesús el que nació ese día. Y el arbolito
de navidad ya no es para fornicar debajo de él, sino para poner regalitos.
Constantino cristianizo todas las fiestas de los pueblos paganos, para dejar
contentos a todos. Constantino engloba todas las religiones (y sus prácticas) paganas
dentro del cristianismo, para no luchar contra ellas.
Apocalipsis,
17:12 Y
los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino;
pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia.
17:13 Estos tienen un mismo propósito, y entregarán su poder y su autoridad a
la bestia. 17:14 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque
él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y
elegidos y fieles.
Los
diez cuernos representan aquellas personas que van a asumir el liderazgo del
gobierno mundial bajo la dirección del anticristo,
eventualmente agrupando todos los ejércitos humanos para oponerse al retorno
del Señor con Su Iglesia. Las tres palabras para describir a los seguidores del
Señor (llamados, elegidos y fieles)
siempre y únicamente se refieren a la Iglesia. Esto significa que Él viene con nosotros
y no por nosotros.
Apocalipsis,
17:15 Me
dijo también: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos,
muchedumbres, naciones y lenguas. 17:16 Y los diez cuernos que viste en la
bestia, éstos aborrecerán a la ramera, y la dejarán desolada y desnuda; y
devorarán sus carnes, y la quemarán con fuego; 17:17 porque Dios ha puesto en
sus corazones el ejecutar lo que él quiso: ponerse de acuerdo, y dar su reino a
la bestia, hasta que se cumplan las palabras de Dios. 17:18 Y la mujer que has
visto es la gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra.
La
ramera sentada en las aguas indica que habrá un sistema religioso ecuménico,
universal y apostata en la primera parte de la Tribulación. A este sistema lo
reemplazara la religión del anticristo cuando el gane poder político (Mateo, 24:15, 2 Tesalonicenses, 2:3-4). En
algún momento, durante el gobierno del anticristo, la ramera será odiada por el
anticristo y sus partidarios y ellos la destruirán totalmente junto con sus
instituciones.
Este
es el juicio de Dios contra el sistema religioso mundial que rechazo la verdad
de Dios en Cristo. Esto pudiera ocurrir a la mitad de la Tribulación total de 7
años, cuando la bestia (el anticristo)
afirme que es dios y exija a todos que la adoren (Apocalipsis,
13:8, Daniel, 9:27, 11:36-38).
Al
respecto, el Dr. David Diamond observa:
Apocalipsis,
17:15 Me
dijo también: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos,
muchedumbres, naciones y lenguas.
O
sea: esta falsa iglesia, este sistema religioso corrupto, influye sobre
multitudes de naciones.
Apocalipsis,
17:18 Y
la mujer que has visto es la gran ciudad que reina sobre los reyes de la
tierra.
Esta
ciudad es el Vaticano, que influye espiritualmente en gran parte del mundo y lo
arrastra a la idolatría. La iglesia romana gobierna sobre las naciones. Todo
presidente, ni bien asume, tiene que ir al Vaticano, postrarse delante del Papa
y besarle el anillo.
Esta
es la destrucción de la Babilonia religiosa, la cual fue anticipada en Apocalipsis 14:8. A pesar de que el anticristo
subió al poder por medio de la influencia de la religión babilónica, ese mismo
sistema religioso se convertirá en una barrera para su meta final de ser
adorado de manera exclusiva. En 2 Tesalonicenses
2:4 Pablo dijo que él se levanta
contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto.
Y
así tanto él como sus cohortes se volverán en contra de la Babilonia religiosa
para destruirla. Observen que es Dios Quien los pone en esta situación. Durante
“una hora” (la duración de la gran tribulación) la bestia
y sus diez reyes tienen el poder sobre la Tierra para poder destruir a la “mujer” que fue la que
hizo posible que tuviesen el poder, cumpliendo así el propósito de Dios de
destruir la falsa religión que le ha hecho tanto daño a Su creación.
Apocalipsis,
18:1 Después
de esto vi a otro ángel descender del cielo con gran poder; y la tierra fue
alumbrada con su gloria. 18:2 Y clamó con voz potente, diciendo: Ha caído, ha
caído la gran Babilonia, y se ha hecho habitación de demonios y guarida de todo
espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible. 18:3 Porque
todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación; y los reyes
de la tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la tierra se han
enriquecido de la potencia de sus deleites. 18:4 Y oí otra voz del cielo, que
decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados,
ni recibáis parte de sus plagas; 18:5 porque sus pecados han llegado hasta el
cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades. 18:6 Dadle a ella como ella os ha
dado, y pagadle doble según sus obras; en el cáliz en que ella preparó bebida,
preparadle a ella el doble. 18:7 Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en
deleites, tanto dadle de tormento y llanto; porque dice en su corazón: Yo estoy
sentada como reina, y no soy viuda, y no veré llanto; 18:8 por lo cual en un
solo día vendrán sus plagas; muerte, llanto y hambre, y será quemada con fuego;
porque poderoso es Dios el Señor, que la juzga. 18:9 Y los reyes de la tierra
que han fornicado con ella, y con ella han vivido en deleites, llorarán y harán
lamentación sobre ella, cuando vean el humo de su incendio, 18:10 parándose
lejos por el temor de su tormento, diciendo: ¡Ay, ay, de la gran ciudad de
Babilonia, la ciudad fuerte; porque en una hora vino tu juicio!
En
el capítulo 18 se describe a la gran Babilonia primordialmente en sus aspectos
comercial y político. [1] Algunos creen que aquí Babilonia representa
una ciudad literal o una (sola) nación que
personifica los aspectos impíos de la ciudad descripta en el capítulo. [2]
Otros, en cambio, creen que representa todo el sistema mundial impío puesto
bajo el gobierno del anticristo. Aquí se destruye su sistema comercial. En el capítulo
19 Dios juzga su sistema político al final de la Tribulación (Apocalipsis, 19:17-21, Isaías, 13:1-11).
Apocalipsis,
18:4 Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no
seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas;
Este
es el llamado profético de Dios a la última generación de creyentes a que
salgan de la gran Babilonia porque aquellos del pueblo de Dios que permanezcan
en el sistema impío inevitablemente serán "participes de sus pecados"
y por eso los alcanzaran "sus plagas". El llamado a separarse del
mundo y de las falsas instituciones religiosas ha sido un aspecto esencial de
la salvación a lo largo de la historia de la redención (Isaías, 52:11, Jeremías, 51:45, 1 Corintios, 11:32).
Apocalipsis,
18:7 Cuanto
ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y
llanto;
El
sufrimiento y la miseria que caerá sobre la Babilonia comercial será en
proporción a la vanagloria y al modo de vida ostentoso en que vivió. Los
empresarios ricos, poderosos e inescrupulosos que rechazaron a Dios y acumularon riqueza en perjuicio de los
demás serán despojados de sus riquezas en un solo día (Apocalipsis. 18:8, Santiago, 5:1-6).
Apocalipsis,
18:9 Y los reyes
de la tierra que han fornicado con ella, y con ella han vivido en deleites,
llorarán y harán lamentación sobre ella, cuando vean el humo de su incendio,
Lloraran
y se lamentaran quienes tenían su principal interés en el dinero, el lujo y la
satisfacción del placer, porque se ha destruido el dios de su vida. Ya no
pueden sacar provecho de su mercadería, pues se han terminado sus grandes
riquezas (Santiago, 5:1-9).
Aquí
Dios declara con claridad su odio a los negocios y gobiernos que se fundan en
la avaricia y el poder opresivo. Él está en contra de quienes buscan las
riquezas, la comodidad y los placeres en lugar de los modestos valores de
Jesucristo. Los que viven en lujos y placeres egoístas serán aplastados por la
ira de Dios.
Apocalipsis,
18:2 Y
clamó con voz potente, diciendo: Ha caído, ha caído la gran Babilonia, y se ha
hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de
toda ave inmunda y aborrecible.
Esta
es solo una de las diferencias entre la verdadera iglesia y la iglesia romana.
Además
están las siguientes:
Apocalipsis,
18:3 Porque
todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación; y los reyes
de la tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la tierra se han
enriquecido de la potencia de sus deleites.
Apocalipsis,
17:4 Y
la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro de piedras
preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de
abominaciones y de la inmundicia de su fornicación;
A
esta mujer, se la describe como a una PROSTITUTA
seductora, que embriago a los reyes de la tierra y sedujo a las naciones en pos
de si, extraviándolas espiritualmente (obro como
obra toda prostituta seductora).
Apocalipsis, 18:4 Y
oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis
partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas;
Salid
de ella pueblo mío, significa que nuestro Señor Jesucristo reconoce que parte
de su pueblo está dentro de la iglesia romana. Si usted es católico romano,
sepa también que el propio Jesucristo le advierte que deberá salir a tiempo de
esta iglesia impostora (y este es el tiempo), porque ella será destruida, junto
con usted si no se sale.
Si
usted no se sale de esta abominación religiosa, será “participe de sus pecados”
(o sea: cómplice), por lo cual usted recibirá también el
castigo que está destinado a ella.
Si
usted es católico, no podrá luego abogar “desconocimiento”
de la ley de Dios, porque esto está en la Biblia. Lo dice Dios. Claramente,
además.
Apocalipsis, 18:5 porque sus pecados han
llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades.
¿Por qué Dios permitirá la destrucción de la
iglesia romana?. Porque, en los días del cumplimiento de las profecías del
libro de Apocalipsis, los pecados de esta RAMERA habrán alcanzado su
punto culminante, su punto más alto, ya que fornicara con el anticristo.
En
algún momento, el centro mundial de operaciones de estos tres sistemas
mundiales (religioso, comercial y político) se consolidará en
Babilonia.
Zacarías 5:5-11 nos habla sobre una mujer dentro de un canasto (efa), la
cual representa la iniquidad del mundo, y que es trasladada de su posición
actual a un lugar preparado para ella en la planicie de Sinar, lo cual es una
referencia a la localización de Babilonia y que queda en el actual Irak. Unas
mujeres con alas de cigüeña (un ave inmunda), levantan el canasto en el aire y lo
llevan allá.
Zacarías, 5:5 Y salió aquel ángel que
hablaba conmigo, y me dijo: Alza ahora tus ojos, y mira qué es esto que sale. 5:6
Y dije: ¿Qué es? Y él dijo: Este es un efa que sale. Además dijo: Esta es la
iniquidad de ellos en toda la tierra. 5:7 Y he aquí, levantaron la tapa de
plomo, y una mujer estaba sentada en medio de aquel efa. 5:8 Y él dijo: Esta es
la Maldad; y la echó dentro del efa, y echó la masa de plomo en la boca del
efa. 5:9 Alcé luego mis ojos, y miré, y he aquí dos mujeres que salían,
y traían viento en sus alas, y tenían alas como de cigüeña, y alzaron el efa
entre la tierra y los cielos. 5:10 Dije al ángel que hablaba conmigo: ¿A dónde llevan el efa?
5:11 Y él me respondió: Para que le sea edificada casa en tierra de
Sinar; y cuando esté preparada lo pondrán sobre su base.
La
Babilonia de Nabucodonosor había sido conquistada por los persas cerca de cien
años antes de la profecía de Zacarías. En 200 años más, los persas serían vencidos por Alejandro Magno,
quien tenía la intención de dragar el río Éufrates para hacer de Babilonia un
gigantesco puerto fluvial para que pudieran llegar barcos del Golfo Pérsico y
de otras regiones del oriente. Sin embargo, Alejandro murió sin haber iniciado
su proyecto. Cuando uno de los sucesores de Alejandro construyó su puerto de
ensueño en una bahía natural sobre el vecino Río Tigres y lo llamó Bagdad,
Babilonia menguó a ser un pueblo de 10.000 habitantes, y sus masivos muros
fueron derribados para utilizarlos como bloques de construcción.
Las
condiciones presentes en Irak podrían perfectamente estarnos dirigiendo hacia
el cumplimiento de la profecía de la Biblia para que Babilonia sea restaurada
en una poderosa ciudad en preparación a su última y completa destrucción.
Ninguna otra ciudad, excepto Jerusalén, se menciona tanto en la Biblia como
Babilonia, y en los seis capítulos dedicados a su destrucción (Isaías 13-14,
Jeremías 50-51, y Apocalipsis 17-18), nunca ha sido destruida de la
manera como se indica en estos pasajes.
Es
muy tentador tomar estos pasajes de manera figurada, y verlos como que
representan, por ejemplo, a la ciudad de Nueva York, o a alguna otra ciudad.
Aunque podamos estar de acuerdo en que este tipo de castigo ciertamente lo
merecen estas ciudades, no existe ninguna razón bíblica para pensar esto. Las
planicies de Sinar son un lugar geográfico específico en Irak, y después de que la religión
pagana se mudó de Babilonia a Pérgamo durante el tiempo del Imperio Griego,
nunca regresó allá como lo requiere la profecía bíblica.
Y recuerden, aquí no estamos hablando
solamente de religión. El sistema de Babilonia también incluye los componentes
gubernamental y comercial. Esto será confirmado a través de todo Apocalipsis 18. Hoy día no
existe ninguna sola ciudad en el mundo que albergue el centro de operaciones de
esos tres componentes.
La
Babilonia religiosa fue destruida en Apocalipsis 17. Pero ahora la misma Babilonia quedará reducida a ruinas,
quemada por el fuego del justo juicio de Dios, y será morada de demonios. Los
líderes mundiales que se han enriquecido por medio de su corrupto sistema llorarán
y harán lamentación sobre ella totalmente aterrorizados. El sistema de gobierno
con el cual todos ellos obtuvieron su injusta riqueza a expensas de sus
subordinados ya no existe más.
Apocalipsis, 18:11-20 nos habla de la
destrucción del componente comercial.
Apocalipsis, 18:11 Y los mercaderes de la
tierra lloran y hacen lamentación sobre ella, porque ninguno compra más sus
mercaderías; 18:12 mercadería de oro, de plata, de piedras preciosas, de
perlas, de lino fino, de púrpura, de seda, de escarlata, de toda madera
olorosa, de todo objeto de marfil, de todo objeto de madera preciosa, de cobre,
de hierro y de mármol; 18:13 y canela, especias aromáticas, incienso, mirra,
olíbano, vino, aceite, flor de harina, trigo, bestias, ovejas, caballos y
carros, y esclavos, almas de hombres. 18:14 Los frutos codiciados por tu alma se apartaron de ti, y
todas las cosas exquisitas y espléndidas te han faltado, y nunca más las
hallarás. 18:15 Los mercaderes de estas cosas, que se han enriquecido a costa
de ella, se pararán lejos por el temor de su tormento, llorando y lamentando, 18:16 y diciendo:
¡Ay, ay, de la gran ciudad, que estaba vestida de lino fino, de púrpura y de
escarlata, y estaba adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas! 18:17 Porque en
una hora han sido consumidas tantas riquezas. Y todo piloto, y todos los que
viajan en naves, y marineros, y todos los que trabajan en el mar, se pararon
lejos; 18:18 y viendo el humo de su incendio, dieron voces, diciendo: ¿Qué
ciudad era semejante a esta gran ciudad? 18:19 Y echaron polvo sobre sus
cabezas, y dieron voces, llorando y lamentando, diciendo: ¡Ay, ay de la gran
ciudad, en la cual todos los que tenían naves en el mar se habían enriquecido
de sus riquezas; pues en una hora ha sido desolada! 18:20 Alégrate
sobre ella, cielo, y vosotros, santos, apóstoles y profetas; porque Dios os ha
hecho justicia en ella.
Apocalipsis, 18:20 Alégrate sobre ella,
cielo, y vosotros, santos, apóstoles y profetas; porque Dios os ha hecho
justicia en ella.
Todos
los santos en el cielo y en la tierra se alegran en el justo juicio de Dios
sobre el gran sistema satánico de maldad con todas sus perversas
manifestaciones, sus placeres pecaminosos, sus lujos egoístas, su gobierno
humanista y su comercio ateo. La celebración exuberante de los santos en el
cielo descripta en Apocalipsis, 19:1-10 es proporcional a
su actual aflicción por el triunfo del mal en este mundo. La señal distintiva
de los verdaderos hijos de Dios es su congoja por la conducta inmoral que los
rodea.
Podríamos
dedicarle bastante tiempo a discutir los detalles de la destrucción de
Babilonia, pero un rápido repaso de Isaías 13-14 y Jeremías 50-51 nos será obvio de que nunca antes en la
historia esta malvada ciudad y todo lo que representa, ha sido totalmente
destruida. Y aun si la propia ciudad ha sido reducida a polvo y lo que quedó
echado al mar, los sistemas que fueron establecidos allí ciertamente han
subsistido hasta nuestros días.
En
lo que me gustaría enfocarme aquí es en la naturaleza insidiosa del sistema
mundial del comercio y cómo ha esclavizado a la humanidad al punto que éste ha
sobrepasado la opresión religiosa que ya hemos discutido, porque, por su
naturaleza, le cierra las puertas a la verdad de Dios. Consideren las
siguientes palabras del Señor en Sus Parábolas del Reino.
Mateo, 13:22 El
que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra, pero el afán de
este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace
infructuosa.
De
mis estudios he llegado a la conclusión de que con la subida de los sistemas
mundiales religioso, político y económico del anticristo, todos estos serán
consolidados bajón una sola autoridad, y esta autoridad estará localizada en
Babilonia. Todo esto comprenderá al Vaticano,
la Meca, las Naciones Unidas, los mercados bursátil y de bienes de consumo
y el del intercambio monetario, todos en un solo sistema.
Muchos
de nosotros no nos hemos dado cuenta hasta qué grado es que estamos
esclavizados. Y no es sino hasta que usted se sale del sistema que empieza a
revisar la atadura que tenía. Su audiencia estadounidense se reía a carcajadas
cuando Charles “el Tremendo” Jones, uno de mis cómicos favoritos, los acusaba
de “gastar el dinero que no tenemos, para comprar las cosas que no necesitamos,
para impresionar a la gente que nos desagrada”. Esta acusación va más allá de
la verdad, pero parece que lo único que podemos hacer con eso es reírnos de
nosotros mismos.
El
secreto para el éxito fue una vez identificado como la habilidad de encontrar
una necesidad y llenarla. Y ahora, la industria de la publicidad promete, “Tráiganos un producto, y nosotros produciremos la necesidad para el
mismo.” Los costos promocionales pueden añadirle entre un 30 a un 50% al precio del artículo que compramos, y aun así, de manera
voluntaria pagamos el precio, porque hemos sido convencidos de que necesitamos
lo que los anunciantes están vendiendo. Luego le agregamos el costo del
financiamiento a nuestras compras porque en realidad no tenemos los ingresos
reales para tener el estilo de vida al que hemos sido manipulados a tener.
Entonces, nos endeudamos a futuro para pagar en el presente.
Así
que no debe de sorprendernos que durante años los estadounidenses por lo
general gastan un 125% de sus ingresos anuales, acumulando así miles de
miles de millones de dólares en deudas producto del consumo, solamente para
aparentar ser más exitosos de lo que en la realidad admiten ser, porque la
industria publicitaria hace parecer que eso es lo correcto de hacer. Y así
creemos que somos libres.
Se
pueden citar estadísticas similares para el resto del así llamado mundo
desarrollado, a pesar de que con frecuencia estas son generalmente oscurecidas
por las promesas ridículas de los gobiernos de hacerse cargo de ellas. (¿Es que no se dan cuenta de que los gobiernos no producen riqueza
sino que la consumen?). Para el resto de la gente, los ingresos
contados al centavo, mantienen a las personas en un estado de pobreza que
realmente se puede sentir, mientras que los que les pagan esos centavos,
generalmente disfrutan de un estilo de vida de un lujo obsceno.
Así
que ya sea que piense que es rico o que sepa que es pobre, el ser humano
promedio está económicamente esclavizado de por vida. Y tanto como Dios odia la
falsa religión, de la misma manera odia el sistema económico que esclaviza a Su
pueblo. Y entonces, cuando sea el momento de enviar Su venganza sobre los
responsables, no habrá nada que la detenga. Los gritos de utilizar la fuerza
excesiva y de la inapropiada falta de moderación, caerán en oídos sordos esta
vez. La Babilonia comercial y su sistema mundial de esclavitud que han oprimido
a la humanidad, ya no lo harán más, y todos aquellos que se han enriquecido con
este sistema, lamentarán su pérdida.
Apocalipsis,
18:21 Y
un ángel poderoso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la arrojó
en el mar, diciendo: Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran
ciudad, y nunca más será hallada. 18:22 Y voz de arpistas, de músicos, de
flautistas y de trompeteros no se oirá más en ti; y ningún artífice de oficio
alguno se hallará más en ti, ni ruido de molino se oirá más en ti. 18:23 Luz de
lámpara no alumbrará más en ti, ni voz de esposo y de esposa se oirá más en ti;
porque tus mercaderes eran los grandes de la tierra; pues por tus hechicerías
fueron engañadas todas las naciones. 18:24 Y en ella se halló la sangre de los
profetas y de los santos, y de todos los que han sido muertos en la tierra.
Un
ángel declara la caída final de la Babilonia política. Sera totalmente
destruido el anticristo y su sistema mundial impío en "la batalla de
aquel gran día del Dios Todopoderoso" cuando Cristo vuelva a la
tierra (Apocalipsis, 14:8, 16:14, 16, 19:11-21).
Todos
los males presentes en la Tierra tienen su origen en Babilonia, y finalmente la
destrucción total y permanente de los sistemas religioso, gubernamental y
económico de la humanidad habrá llegado. Luego veremos lo que Dios ha ordenado
para remplazar estos sistemas cuando el quinto reino de Daniel, 2 llegue.
Daniel, 2:44 Y
en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será
jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá
a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre,
parte 2 del 19 al 20 |
LIBROS DEL APOCALIPSIS 17 al 20
Reviewed by jireth
on
marzo 21, 2020
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