Sanidad Interior y Liberacion PART.3


  El amor será anulado.


La falta de perdón corta el fluir del amor de Dios en nosotros; no se puede amar y odiar al mismo tiempo. Por eso, en una relación, si no se sanan las heridas, no fluirá el amor de Dios en su plenitud. Algunas veces, usted escucha decir a ciertos cónyuges: "ya no le amo más", y no es que no le ama, sino que le ha herido tanto que esa falta de perdón cubre el amor que le pueda tener. La persona que no perdona siempre será un perdedor, y las mayores heridas no se las causará a otras personas sino a sí mismo.
Dios no nos perdona Si no perdonamos a aquellos que nos ofenden, tampoco Dios nos perdonará.
El Señor nos lleva contra la pared a tal grado que si no perdonamos, Él tampoco nos perdona. Dios nos puede pasar algunas faltas, especialmente cuando somos inmaduros, pero Él nunca nos deja pasar la falta de perdón.
«En aquel tiempo, respondiendo Jesús, dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y de los entendidos, y las revelaste a los niños». Mateo 11.25

Niveles de consecuencias si no perdonamos
La falta de perdón nos lleva al resentimiento. Éste, a su vez, nos lleva a las raíces de amargura y al odio, produciendo una cauterización de la conciencia.
¿Cómo perdonar y olvidar?
Dios perdona y olvida. Dios tiene la capacidad de poder borrar de su memoria las cosas del pasado, pero nosotros los humanos no tenemos esa capacidad; por esa razón, Dios tiene que lidiar con nuestro corazón. Sí, podemos recordar lo que nos han hecho, pero si hemos perdonado de verdad, ya no nos causará dolor. Olvidar para nosotros significa no dar importancia a lo sucedido.
Pasos para perdonar
1.     una decisión de perdonar con todo su corazón.
Recuerde que si usted espera sentir algo para perdonar, nunca lo va sentir. El perdón no se basa en sentimientos, sino en un compromiso de obedecer a Dios y a su Palabra.
«Así también mi Padre celestial hará con vosotros, si no perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas». Mateo 18.35


2. Haga una lista de personas y cosas que lo han herido durante toda su vida.
3. Arrepiéntase por guardar esta falta de perdón en su corazón y por el pecado de juicio.
La palabra de Dios nos ordena desechar todo resentimiento, amargura, odio y reconocer la falta de perdón hacia otros.
4. Exprese su perdón en forma verbal.
«Confesaos vuestras ofensas unos a otros y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho». Santiago 5.16
5. Renuncie a todo espíritu de resentimiento, amargura, odio y falta de perdón.
Confiese su perdón a cada una de las personas, especificando las razones por las cuales tiene que perdonarlos.
Usted puede y debe perdonar. Hágalo repitiendo en voz alta y con todo su corazón:
"Señor: Yo perdono a (nombre de la persona). Le perdono por: (nombre aquí detalladamente todas las heridas y el dolor que le causaron y cómo le hicieron sentirse)".
Después de haber perdonado a cada persona, por cada recuerdo doloroso, por cada herida recibida, entonces termine con esto:
"Señor: Yo te entrego a todas estas personas y mi derecho a buscar venganza contra ellos. Opto por no aferrarme a mi amargura ni a mi enojo. Te pido, Espíritu Santo, que sanes mis emociones dañadas. Te lo pido en el nombre de Jesús.
¡Amén!" Algunas preguntas acerca del perdón:
1.    ¿Cómo saber si hemos perdonado?
Cuando al recordar lo que nos hicieron, ya no nos duele más. Recordamos, pero ya no hay dolor en nosotros.
2.    ¿Qué hay que hacer con aquellos que no aceptan nuestro perdón?
Una vez que le hayamos pedido perdón, de ahí en adelante, si la persona no quiere perdonar, ya es problema entre ella y Dios. Lo único que se puede hacer es orar.
3.     ¿Qué hacer con  aquellos que nos ofenden constantemente?
Perdonarlos todas las veces que sea necesario.
Jesús dijo: "70 veces siete". Luego, debemos tratar

La Raíz de Amargura
La raíz de amargura es una de las mayores causas por la cual muchos creyentes están en miseria, enfermos, e incluso, apartados de la gracia del Señor. La amargura es más fuerte que la falta de perdón, ya que desarrolla raíces con ella, tales como: ira, enojo y maledicencia. Es una puerta abierta para que los espíriTus inmundos atormenten a la persona.
«Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe,
y por ella muchos sean contaminados». Hebreos 12.15
y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. Quítense de Vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo». Efesios 4.30-32
¿Qué es la raíz de amargura?
La amargura es una angustia del alma; es estar triste, desanimado y en desesperación; es sufrir una decepción y sentirse sin esperanza. Es cómo se siente el alma por circunstancias que nos sobrecogen y que no podemos cambiar; es tener una profunda tristeza y resentimiento, acompañada de hostilidad e ira reprimida.
La amargura es un resentimiento que viene a ser el veneno del alma y va contaminando todo hasta que destruye la vida de Dios en nosotros. También, acaba los valores de la personalidad y al hombre en su totalidad.

La amargura es la única contaminación que hace olvidar toda buena obra que Dios y las personas hayan hecho en nosotros. La raíz de amargura es el semillero fértil del enemigo, del cual él toma ventaja.

Por eso, todo creyente debe vivir con un continuo espíritu de perdón. Si la amargura no se trata a tiempo, se va ir desarrollando en los siguientes niveles:
Crece
• Se acumula
• Madura
Como la amargura es un resentimiento que tiene raíces, éstas se van arraigando cada vez más en lo profundo del corazón del propio hombre. Crecen hasta ahogar el alma, ya que su crecimiento es interno.
Después de que este ciclo pasa, se llega a convertir en un gran árbol. Los frutos de ese árbol serán: odio, resentimiento, ira y celos. La amargura fácilmente la vemos en los demás, pero se nos hace difícil identificarla en nosotros mismos.

¿Cuáles son las causas de la amargura?
1. Cuando se nos ha sido quitado algo o hemos perdido algo.
Un buen ejemplo de esto fue Noemí cuando perdió a su esposo y a sus hijos. Siempre que algo grande o importante es quitado de nuestra vida, el enemigo enviará un espíritu de amargura. Noemí tenía raíces de amargura contra Dios porque pensaba que Dios le había quitado a su esposo y a sus hijos. Una de las razones por las cuales muchos creyentes tienen raíces de amargura es porque están inconformes con Dios. Es de hacer notar que, Dios es el autor de toda buena dádiva,
2 El no es el autor de lo malo. La persona con raíz de amargura tiene la capacidad de vivir amargada toda la vida y siempre estar recordando y repitiendo lo que le hicieron y lo que le fue quitado.
«¿Habíais vosotras de esperarlos hasta que fuesen grandes? ¿Habíais de quedaros sin casar por amor a ellos? No, hijas mías; que mayor amargura tengo yo que vosotras, pues la mano de Jehová ha salido contra mí». Rut 1.13
Esaú perdió su progenitura, y cuando se dio cuenta de esto, le vino una gran amargura. Refiérase a Génesis 27.34-40

2.     Cuando tenemos circunstancias que no podemos cambiar.
Cuando una persona se encuentra bajo una circunstancia que le sobrecoge y que no puede cambiar, le viene el desánimo, se angustia, se desespera y se siente sin esperanza. Ésos son los momentos en que se debe meditar en las promesas de Dios y en la esperanza que tenemos en Cristo. Cuando una persona está sometida por mucho tiempo a un problema difícil durante el cual no ve cambio alguno, está en peligro de abrir las puertas a un espíritu de amargura si lo permite.
La expresión típica de una persona amargada es: "me doy por vencido porque no hay esperanza ni posibilidades de cambio".
3.     Cuando alguien nos ha herido emocionalmente.
Una de las razones por las cuales viene la amargura es por las heridas del pasado. Por tal razón, cuando viene una ofensa a nuestra vida, se debe perdonar inmediatamente y no permitir que el sol se ponga sobre el enojo. Las heridas deben ser sanadas lo más pronto posible. Recuerde el ciclo de las heridas emocionales:
Ofensa • Falta de perdón • Resentimiento • Raíz de amargura • Odio • Cauterización de la conciencia
 
¿Cuáles son las indicaciones que muestran la raíz de amargura en una persona?
La queja y la murmuración continua de las circunstancias de la vida y en contra de otras personas.
«E hizo Moisés que partiese Israel del Mar Rojo, y salieron al desierto de Shur; y anduvieron tres días por el desierto sin hallar agua. Y llegaron a Mara, y no pudieron beber las aguas de Mara, porque eran amargas; por eso le pusieron el nombre de Mara. Entonces el pueblo murmuró contra Moisés, y dijo:
¿qué hemos de beber? Y Moisés clamó a Jehová, y Jehová le mostró un árbol; y lo hechó en las aguas, y las aguas se endulzaron. Allí les dio estatutos y ordenanzas; y allí los probó». Éxodo 15.22-25
* Todo el tiempo está airada y maldice de continuo.
«Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. Quítense de
vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería, y maledicencia, y toda malicia». Efesios 4.30, 31
Siempre recuerda detalles, tales como: nombres, cosas, palabras y circunstancias que fueron hechas y dichas. La raíz de amargura se torna en un registro minucioso de todo.
El aislamiento. Toda persona con raíz de amargura se aisla porque tiene miedo a que la hieran más de lo que está.

¿Cuáles son las consecuencias de la raíz de amargura?
• Nos puede llevar a apartarnos de Cristo. La amargura tiene la capacidad de apartarnos de la fe, y esto es un riesgo que no se puede tomar.
«Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados». Hebreos 12.15
• Es la causante de muchas enfermedades físicas. Muchas de las enfermedades que las personas padecen en su cuerpo no son por razones realmente físicas, sino que están originadas en un alma enferma de amargura que exterioriza esto en un desbalance físico. Algunos ejemplos son: La artritis, las úlceras, el cáncer, el insomnio, la migraña y los dolores de espalda.
• La amargura nos encierra en una prisión.
«...porque en hiel de amargura y en prisión de maldad veo que está». Hechos 8.23
Hoy día, muchos creyentes se sienten encerrados en prisiones financieras y en problemas de familia. Esto es por causa de la amargura que hay en el alma. La amargura hace olvidar todo lo bueno que hayamos recibido de Dios y de las personas. Es algo que nos cubre, nos ciega y no nos deja apreciar lo bueno de la gente. Esto es debido a que creemos que siempre estamos en lo correcto y que todo el mundo está equivocado.
¿Cómo nos deshacemos de la raíz de amargura?
• Sacando algo bueno de todo lo malo que nos haya sucedido.
«¿Por qué fue perpetuo mi dolor, y mi herida desahuciada no admitió curación? ¿Serás para mí como |í cosa ilusoria, como aguas que no son estables? Por tanto, así dijo Jehová: Sí te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca, conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos». Jeremías 15.18,19
Dios le dijo a Jeremías: Si miras lo bueno y lo precioso que yo voy a sacar de eso malo, tú saldrás de ese dolor; y aunque yo no te haya enviado este problema, yo puedo hacer algo precioso de esto para tu crecimiento, y convertir lo malo en una bendición.
Nunca será sanado de un dolor, de una circunstancia difícil, de una desesperación, de eso que le fue quitado, ni de esa herida que le hicieron, si no ve que, de eso negativo, Dios traerá una bendición. Dios tiene el poder y la autoridad para hacerlo.
* Tome la decisión de perdonar y de pedir perdón a Dios y a las personas que sabe que ha ofendido. Haga una lista de personas que le hayan herido o cambiara por usted. Si ha perdido algo, le hayan robado algo Él se lo devolverá de una manera u otra, pero no deje que una falta lo lleve hasta una raíz de amargura.
Dios tiene planes muy lindos para usted. No se detenga, y continúe marchando siempre hacia circunstancia con la cual fue herido, y añada si le han quitado algo o hubo alguna situación que lo ha podido sobrecoger.

Por favor, sea específico con cada palabra y adelante. Jesucristo está para ayudarlo. ¡Amén!.

Exprese su perdón en forma de confesión.
Arrepiéntase por el pecado de juicio contra la persona que le hirió y contra Dios.
Cuando hay falta de perdón y amargura en nuestra vida, juzgamos a las personas y eso se convierte en pecado, abriéndole así una puerta al enemigo.
Repita esta oración: Padre, en el nombre de Jesús, yo renuncio a toda raíz de amargura en mi vida, y cancelo las consecuencias por haberla guardado en mi corazón. Repita: yo perdono a:  por ______________-Señor, te entrego todo mi dolor y la herida que fue abierta por esa causa. Renuncio al derecho de vengarme, y por el contrario, bendigo a todos aquellos que me hirieron. Señor, yo renuncio a toda raíz de amargura, ira, odio, rencor, maledicencia, celos y me declaro libre, en el nombre de Jesús. Amén.
La amargura puede ser algo terrible para su vida. Aprenda a ser un perdonador y confíe en el Señor.
Las circunstancias que no puede cambiar, Él las

El Rechazo
Las necesidades básicas de una persona se satisfacen por medio del amor, el respeto, la aceptación y la seguridad. La raíz de rechazo provoca que el individuo no pueda recibir ninguna de estas virtudes, ya que se crea en la persona un gran vacío de amor.
El rechazo es el plan maestro del enemigo
El rechazo es usado por el enemigo para destruir gran parte del cuerpo de Cristo. También, nos roba la posibilidad de ser usados por Dios y de recibir sus bendiciones. Toda persona, en alguna etapa de su vida, ha experimentado el rechazo en un nivel u otro. El rechazo es el menos tratado y diagnosticado.
Casi todas las personas, sin importar país, raza o condición social, han tenido algún problema de rechazo. En muchos casos, la causa principal de los problemas en esas personas es haber pasado por una amarga experiencia. Al ser un problema tan común no se le da la debida importancia que merece, por esta razón, es el menos tratado y diagnosticado.


¿Cuáles son las diferentes etapas del desarrollo del individuo donde se genera el rechazo?
1.    Rechazo en la edad prenatal.
Los niños pueden sufrir rechazo cuando aún están en el vientre. Ellos son seres espirituales y pueden percibir todos los problemas emocionales de su madre. Hay mujeres que quedaron embarazadas por diferentes motivos: violaciones, actos de incesto, adulterio, fornicación o sexo no deseado. Cualquiera de estas circunstancias genera en la madre un rechazo al embarazo, y esto repercute directamente en las emociones de ese bebé.
Las circunstancias que rodean a la mujer embarazada y su actitud hacia la criatura traen influencia al útero donde está el niño o la niña. Este rechazo se crea, particularmente, si hay una preferencia de parte de los padres por un determinado género en el bebé (femenino o masculino). Un parto difícil también causa sentimiento de rechazo.
2.    Rechazo en la edad de la niñez
La proyección de la seguridad de un niño se va adquiriendo durante los primeros seis años. En estas edades, se van a formar los valores, la seguridad y la identidad. Éstas son las posibles causas de rechazo en la niñez:
Falta de atención y cuidado de parte de los padres, especialmente de la madre
Adopciones
• Impedimentos físicos
• Comparación entre hermanos
• Palabras hirientes y crítica constante de parte de sus padres y de su familia
• Abuso físico, sexual y emocional
• Falta de interés (no es escuchado ni protegido)
• Sobreprotección
• Falta de amor, caricias y halagos
• Control y dominio excesivo
• Abandono de los padres
• Sustitución de amor por regalos
• Hogares destruidos, divorcios, entre otros
• 3. Rechazo en la edad de la adolescencia
A medida que el niño crece, puede experimentar diferentes tipos de rechazo durante la edad de la adolescencia. Algunas causas de rechazo en la edad de la adolescencia pueden ser:
Exceso de disciplina
• Abuso mental, físico o sexual
• Presión por medio de sobornos para que sea mejor en la escuela
• Avergonzarle delante de la gente
• Pobreza en la familia
• Sobrecarga en los trabajos de la casa
• Padres dominantes
• Presionar más allá de su habilidad y control

3.    Rechazo en la edad adulta
• Culpabilidad por un embarazo no deseado
• Un aborto planificado o no planificado
• Inhabilidad para lidiar con el menosprecio
• Vergüenza por un complejo físico
Desastres financieros
• Ser aislado de la familia o ser enviado a un convento
• La inhabilidad para comunicarse de forma efectiva
4.    Rechazo en el matrimonio
• Muerte de uno de los cónyuges
• Divorcio
•   Infidelidad por parte de uno de los cónyuges
• Crueldad mental, física o sexual
• Inhabilidad para tener hijos
Cualquier causa de rechazo, va a afectar nuestra relación con Dios, con nuestra familia, con nuestros hermanos (as) y con todas aquellas personas con las cuales nos relacionamos.
Algunas veces, la imagen que percibimos de nuestros padres es la imagen que tenemos de Dios. En muchas ocasiones, no nos sentimos dignos de acercarnos a nuestro Padre porque creemos que Él nos va a rechazar, ya que eso es lo que hemos recibido en nuestro hogar.

Padres rechazados producirán hijos rechazados. Los padres que han sufrido rechazo hereditario antes de casarse, no van a poder dar amor a sus hijos.
Existen tres tipos de rechazo, los cuales tienen diferentes síntomas. Veamos cuáles son:
1. Raíz de rechazo con reacciones agresivas
La persona que se siente rechazada tiende a:
• Rehusar ser confortada. No le gusta ser tocada físicamente ni tampoco le gusta dar amor físico.
• Rechazo de otros. La gente que se siente rechazada necesita tiempo y espacio para ventilar sus sentimientos, si no tienen ese tiempo, sus actitudes logran que otros los rechacen.
• Presentar señales de dureza emocional. Cuando la persona ha sido rechazada, puede ser fría, insensible, introspectiva y egoísta. Además, tiende a usar mucho su arma más poderosa: la lengua.
• Ser escéptica e incrédula. Cuando una persona se siente rechazada, pierde su confianza en la familia, los amigos y la gente en general; pierde la fe en los buenos motivos de las personas y sospecha de todo el mundo.


Ser testaruda. Usualmente, esta persona tiende a decir: "éste es el único camino", y nadie la hace cambiar; es una persona de dura cerviz. Tiene la certeza de que lo que hace y piensa es lo correcto, sin tomar en cuenta otra opinión.
Mostrar actitudes agresivas. Actúa con ira para defenderse del rechazo.
Concebir pensamientos de venganza. Las personas que son víctimas de rechazo pueden volverse tan resentidas que pueden llegar a planificar vengarse, sintiéndose después culpables.
Jurar y usar un lenguaje sucio. Un sinnúmero de personas que sufren rechazo hablan palabras obscenas y sucias cuando están bajo presión.
Argumentar. Argumentan sin sentido y sin fundamento porque necesitan sentir que están en lo correcto. Cuando pierden, se sienten más rechazados.
Comportarse con necedad. Por ejemplo, una madre que le ordena a su niño que se siente. Como es un niño, obedece y se sienta, pero, en su corazón rebelde se dice a sí mismo: "yo estoy de pie".
La rebelión. Éste es un síntoma muy común en una persona rechazada; le es difícil someterse; siempre está argumentando y razonando el porqué tiene que obedecer.
Síntomas de rechazo a uno mismo
Ésta es la segunda parte del rechazo, y tiene que ver con la persona en su intimidad, con respecto a sí misma, y se refleja en el concepto que tiene esta persona de sí misma.
• Baja autoestima. La persona rechazada se considera insignificante y sin ningún valor; se subestima constantemente.
• Complejo de inferioridad e inseguridad. Algunas veces, busca seguridad en las personas, en las cosas, en los animales o en el dinero.
• Se siente inadecuada. Le da mucho temor emprender proyectos por pequeños que puedan ser, y siempre está pensando que no puede.
• Tristeza o luto. Éstas son manifestaciones externas de una persona que tiene un espíritu herido; siempre está triste y deprimida.
• La auto condenación. La persona se siente por el piso constantemente, culpándose a sí misma por las cosas malas que ocurren a su alrededor. Tiene un temperamento débil, y por lo tanto, es manipulada y controlada fácilmente.
• Inhabilidad para comunicarse. Se le hace muy difícil abrir su corazón a las personas porque no puede comunicar lo que siente. No confía en nadie y cree que si es sincera para decir lo que siente, la van a rechazar.
• Temores de toda clase. Le teme a todo, siente temor a fracasar, temor a cumplir con sus responsabilidades y temor a estar sola.
• Ansiedad, preocupación y depresión. Es muy común ver estos tres síntomas en una persona con raíz de rechazo, debido a la inseguridad de su corazón. Tiene temor y se preocupa de cosas que todavía no han sucedido.
• Negatividad, pesimismo y soledad. Constantemente, la persona rechazada habla de una manera negativa; es pesimista y se siente sola aunque esté con mucha gente a su alrededor.
• Pérdida de identidad. Como resultado de la pérdida de identidad, se puede observar que muchas personas están tratando de encontrar su identidad en la profesión, en las pandillas, en el deporte, en la escuela, en la iglesia y en cualquier lugar donde puedan sentirse aceptados.
Síntomas de temor al rechazo
Las personas que sienten temor a ser rechazadas, se conducen siempre con el mismo patrón.

Se esfuerzan mucho por alcanzar éxito y son dadas a la competencia. Desean llegar a tener éxito en algún área de su vida para demostrarle a los demás su valor y ganar aceptación. Pueden llegar a competir de forma desleal, pues se creen que así van a conseguir respeto y admiración.
Son independientes y se aislan. El temor al rechazo produce en la persona una tendencia a aislarse de los demás, especialmente, durante la adolescencia y después de un fracaso matrimonial.
Padecen  del  síndrome de egocentrismo.
"Todo para mí". Muchas veces, las personas desarrollan actitudes egocéntricas, tales como: autoindulgencia, autojustificación y autojusticia.
Abusan de la actitud de "mis derechos". Cuando se es rechazado, el ego de la persona demanda ser tratado de forma justa y correcta, de acuerdo a sus prescripciones y normas, pero no de acuerdo a las normas de la justicia.
Tienen sentimientos de crítica, juicio, envidia, celo y codicia. Estas cinco características van siempre juntas, y son parte de la personalidad de un individuo con raíz de rechazo. Por ejemplo, cuando ven a alguien prosperar o ser usado por Dios, o cuando se sienten amenazados de que alguien les quite supuesto, surgen fuertemente estos defectos de su carácter.
Son personas propensas a sentir orgullo, egoísmo, altanería y arrogancia.

Tal persona intenta convencer a los demás de que tiene algo de lo cual, verdaderamente, se siente orgulloso. Ellos fuerzan el medidor de la inferioridad y de la baja estima a que aumente a un nivel exagerado, olvidándose de la advertencia que Dios establece por medio de su Palabra.
«No te jactes del día de mañana; porque no sabe qué dará de sí el día. Alábete el extraño, y no tu propia boca; el ajeno y no los labios tuyos». Proverbios 27.2
Son posesivas y manipuladoras. Desde la edad de la niñez hasta la edad adulta, en el matrimonio y fuera de éste, el mensaje de las víctimas de rechazo es: "eso es mío, déjalo quieto". Las personas que se sienten rechazadas se consuelan y se confortan a sí mismas con "posesiones". Ellas son celosas y manipuladoras de lo que creen que es su derecho.
A menudo, demuestran inmadurez emocional.
El rechazo en las edades de la niñez y de la adolescencia retardará la madurez emocional de la persona. Podrá tener 50 años y todavía ser inmadura si permanece con raíz de rechazo en su interior.

• Perfeccionismo. Algunas veces, el perfeccionismo es un problema hereditario y otras veces comienza cuando la persona es rechazada. La persona perfeccionista se dice así misma: "yo haré mi mayor esfuerzo para hacer lo que se espera de mí, para agradar a la gente, y eso hará que yo les caiga bien y me acepten".
• Patrones interrumpidos para dormir. A menudo, el sueño se interrumpe abruptamente, y puede incluso padecer de insomnio.
Algunos escapes falsos para cubrir el rechazo:
* Alcohol. Algunas personas comienzan a beber alcohol en momentos de estrés, ya que no tienen otra manera de escapar ante las presiones de la vida.
* La gratificación sexual. Tanto los hombres como las mujeres, pueden comenzar a estimularse sexualmente y unas de las maneras son: la masturbación, la pornografía y muchos otros actos de lujuria. El uso de la gratificación sexual de cualquier tipo nunca cancela la raíz de rechazo.
* La comida. Algunos hombres y mujeres se vuelven comedores compulsivos, y esto lo hacen para contrarrestar los efectos que produce la raíz de rechazo en sus emociones. Cuando la persona come demasiado, el rechazo se vuelve peor porque engorda, generando así un nuevo mal: la baja autoestima, y además, da lugar a un espíritu de gula.
• Las drogas. La gente con raíz de rechazo busca drogas para calmar el dolor del rechazo y, como resultado, espíritus de adicción vienen a su vida.
• El síndrome de "la popularidad a cualquier precio". Tristemente, hemos orado por muchas personas que estaban tan desesperadas por recibir aceptación y afecto, que han llegado a someter su cuerpo a todo tipo de inmoralidad sexual. Ellas distorsionaron tanto el sentido de su valor, que hicieron ciertas cosas llamadas "especialidades", aun sin quererlas hacer.

El rechazo genera tres tipo de rechazo, que son: raíz de rechazo, rechazo a uno mismo y temor al rechazo, los cuales presentan diferentes síntomas. Para poder entenderlo mejor, veamos el siguiente esquema:[full_width]

 PARTE,4


Sanidad Interior y Liberacion PART.3 Sanidad Interior y Liberacion PART.3 Reviewed by jireth on marzo 16, 2020 Rating: 5

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