Venciendo el Miedo PARTE 3

Esta es la parte más importante que debemos conocer acerca del tema. ¿Cómo podemos ser libres de cualquier tipo de mie-do o temor? Hoy, con la ayuda del Señor, vamos a analizar el contenido de este tópico, paso por paso.


1. Viviendo y caminando en un amor maduro, con poder y dominio propio (con mente lúcida).

¡En el amor no hay temor [el terror no existe], sólo el amor maduro (completo, perfecto), puede echar fuera el temor y expulsar todo rasgo de terror!, pues el temor trae consigo pensamientos de castigo. Entonces, aquel que siente temor no ha alcanzado la completa madurez del amor [todavía no ha crecido a la completa perfección del amor]”. 1 Juan 4:18 (Biblia Amplificada)

El perfecto amor, o el amor que es completamente maduro, perfecto, completo, echa fuera y expulsa todo rasgo de temor.

Todo aquel que no ha madurado no ha sido perfeccionado en el amor, aún abriga temor en su corazón, todavía no ha intercambiado completamente su vida vieja por la vida nueva de Jesús. Quien no camina en completo y maduro  amor, todavía no ha confiado su vida a Dios. Tener una revelación del amor del Padre hacia nosotros, nos lleva a confiar plenamente en Él, de manera que entendemos que, pese de cualquier situación, estamos seguros en Sus manos. Si morimos, para Él morimos, y si vivimos, para Él vivimos. Si perdiéramos todo lo terrenal, sabemos que estamos en sus manos y Él tiene especial cuidado de nosotros. El amor todo lo cree, todo lo soporta, todo lo espera y todo lo sufre. El andar en amor es una decisión basada en un mandamiento, una orden, y no en sentimientos.

 • Un espíritu de amor

“6Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos”. 2 Timoteo1:6

El amor vence al miedo

El verdadero amor es aquel que lo da todo sin esperar nada a cambio, es un compromiso sin egoísmo con la persona a la cual se ama.

Ilustración: Si un hombre entra a su casa con una pistola, obviamente, usted va a sentir temor. Si a esto le agregamos que su hijo está presente, entonces piense por un momento ¿cuál sería su reacción? Claro está que buscaría protegerlo a toda costa, aun a riesgo de su propia vida. Se pondría enfrente de él, como un escudo, para que el hombre le dispare a usted en vez de dispararle a su hijo. Esta reacción es natural en cualquier padre o madre debido al amor que siente por su hijo.

El amor tiene que ver con otros, pero el temor tiene que ver con nosotros mismos. Si amamos de verdad, estaremos dispuestos a dar nuestra vida a fin de salvar a la otra persona; nos aventuramos a tomar cualquier riesgo por amor, como en el caso anterior. Lo opuesto del amor es el temor. Recordemos que la raíz del temor es el egoísmo. Sucede, por ejemplo, cuando Dios nos da una palabra para otra persona, pero no se la decimos por vergüenza, por temor a equivocarnos o por temor al qué dirán. Aquí nos convertimos en egoístas, porque pensamos más en proteger nuestra imagen, que en arriesgarnos por amor a esa persona. Ahí, caminamos en temor y no en amor.

•         Un espíritu de poder

“8...pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”. Hechos 1:8

Cuando usted sabe que tiene poder en Jesús, entonces vence el temor.

Ilustración: Si una persona entra a su casa con un cuchillo y usted no tiene ningún arma, seguramente sentirá miedo; pero si, en cambio, usted tiene una pistola en la mano, ¿sentiría miedo? No, porque siendo así, usted es quien tiene el poder. Lo mismo sucede en lo espiritual; no deberíamos tener miedo, ya que sabemos que Dios nos ha dado su poder a través de la llenura de su Espíritu Santo en nuestras vidas. Entonces, ¿por qué seguimos teniendo temor de actuar?

•         Un espíritu de dominio propio

En algunas traducciones bíblicas, la expresión “dominio propio”, aparece como “mente lúcida”. Algo que debemos tener claro es que, de la misma manera que la fe comienza en la mente, así también el temor empieza en la mente. Cuando una persona tiene una mente lúcida, que piensa con cordura, juicio y sabiduría, no deja que la preocupación y el temor entren a su vida. El fijar nuestra mente en Dios y su Palabra, nos ayuda a vencer el temor.

“3Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado”. Isaías 26:3

Las personas provocan el miedo cuando entretienen pensamientos de preocupación, ansiedad y angustia, debido a que éstos afectan sus emociones y debilitan su voluntad. Todo esto les produce una parálisis que evita que puedan actuar libremente en la vida.

“17Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”. Romanos 10:17

2. Teniendo la revelación de que Dios está con nosotros todos los días de nuestra vida.

“10No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”. Isaías 41:10

Existen más de 365 versos bíblicos –uno para cada día−,

que nos dicen: “no temáis porque Dios está con nosotros”. Quizá no lo veamos físicamente, pero Él está a nuestro lado, más allá de nuestros ojos físicos. Cuando estamos en problemas, Él está allí; cuando estamos pasando por desiertos en nuestra vida, Él está allí. Cuando el negocio no anda bien, Él está allí; cuando el temor nos ataca, Él está allí; cuando todo el mundo nos deja, Él está allí.

“20Y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Mateo 28:20

“6…de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré lo que me pueda hacer el hombre”. Hebreos 13:6

Dios nos ha prometido estar con nosotros todos los días de nuestra vida. Lo único que tenemos que hacer es confiar y creer esa palabra. Si así lo hacemos, estaremos seguros para siempre.

3. Renuncie a todo espíritu de miedo, cobardía y timidez.

Es mi deseo guiarlo en este momento en una oración de auto liberación; después de la cual, si cree con todo su corazón, será libre. Recuerde que Jesús destruyó al que tenía derecho sobre el imperio de la muerte, para que usted fuera completamente libre de toda opresión y atadura, creados por el espíritu de miedo o temor. Crea con todo su corazón, que será libre de cualquier temor a la oscuridad, al fracaso, a la gente, a enfermarse, a perderlo todo, etcétera. Por lo tanto, repita esta oración en voz alta:

Oración de autoliberación

“Padre Celestial, yo renuncio a todo espíritu de temor, de miedo, de cobardía, de timidez, y de temor a la muerte. Ahora mismo, en el nombre de Jesús, ordeno a todo espíritu de miedo que salga de mi vida. Ahora mismo, en el nombre de Jesús, y por el poder de Su sangre, me declaro libre”.

Ahora, respire profundo. Nuevamente, respire profundo y vuelva a hacer la oración hasta que usted sepa o sienta que Dios lo hizo libre.

Hay personas que van a sentir mareos, otros van a sentir deseos de vomitar, otros van a sentir como que algo se va de su cuerpo. Cada vez que esto ocurra, respire profundo. Si por alguna razón usted no fue totalmente libre en su auto liberación, entonces busque la ayuda de un ministro de liberación que pueda orar por usted.

4.        Busque liberación con un liberador o ministro.

Algunas veces, las personas tienen problemas muy profundos, los cuales tienen que ser tratados cuidadosamente. Para ello, tiene que buscarse la raíz del problema, la cual se encuentra por medio de los dones del Espíritu Santo y por revelación divina. Entonces, como dijimos anteriormente, hay que contar con la ayuda de una persona que esté adiestrada en la liberación.

5.         Medite en estos versos bíblicos que nos dicen cómo ser libre del temor.

“7No tendrá temor de malas noticias; su corazón está firme, confiado en Jehová”. Salmo 112:7

“6Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará”. Deuteronomio 31:6

“1Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?” Salmo 27:1

6.        Confronte y resista al enemigo.

“7...resistid al diablo, y huirá de vosotros”. Santiago 4:7

En algunas traducciones, la palabra huir, aparece asociada a temor, temblor y terror. Si usted resiste al enemigo, él huirá con terror y temblor de su vida. El enemigo es un cobarde, y todo su ser está lleno de temor; dondequiera que se encuentre, siente miedo, por lo tanto, nosotros, en el nombre de Jesús, lo vamos a resistir y él va a huir.

Algunos principios importantes acerca del miedo o temor.

▪ El imperio de la muerte está sostenido por el temor.

▪ Jesús destruyó el imperio de la muerte y venció al enemigo.

▪ La raíz principal del temor consiste en el temor a la muerte.

▪ Para vencer el temor a la muerte física y al ego, tenemos que morir al ego y entregar nuestra vida vieja, para recibir la vida nueva de Jesús. Tenemos que entregarle todo al Señor.

▪ Hay un sinnúmero de miedos, temores o fobias, pero de todas ellas nos liberó Dios.

▪ Cuando nuestra mente sea atacada por el miedo, inmediatamente debemos llevar cautivo todo pensamiento a la obediencia de Jesús.

▪ Para vencer el miedo, el arma número uno es andar en perfecto amor.

▪ Debemos tener la revelación de que Dios está con nosotros todos los días de nuestra vida.

▪ Usted mismo puede ser libre de temor, renunciando a ese espíritu.

▪ Si usted desea una liberación más profunda, busque un ministro o liberador.

▪ Medite en la palabra de Dios.

▪ Resista y confronte el miedo y él huirá con mucho temblor y terror. El enemigo está lleno de cobardía y temor, todo su ser está lleno de miedo; por eso, si usted lo resiste en el nombre de Jesús y por el poder de su sangre, él huirá de usted.

Creo, personalmente, que la liberación es progresiva en nuestras vidas; y que a medida que vamos madurando en el Señor, vamos
siendo libres en muchas áreas. Algunas personas son libres al instante en que reciben a Jesús, aunque esto no es muy común; pues la mayoría es liberada de acuerdo al crecimiento que tenga en Dios.
¿Qué es una atadura?
Es una influencia demoníaca que impide que una persona haga lo correcto. Aun cuando sabe lo que debe hacer, no lo hace, porque las influencias demoníacas se lo impiden.
¿Qué es la autoliberación?
Es pasar el proceso de la liberación por uno mismo. Ocurre cuando un creyente se arrepiente delante de Dios y renuncia por sí mismo a cualquier espíritu demoníaco que oprime su vida. Esto es hecho por medio de la autoridad y el poder del Espíritu Santo, sin la ayuda de otra persona.
Una de las razones por las que falla la autoliberación, es que la persona se encuentra bajo fuerte control  demoníaco o que está controlada por espíritus familiares.
Esto significa que los espíritus que la están atando han estado en la familia por generaciones enteras y no se dan por vencidos fácilmente. En este caso, no es sólo cuestión de echarlos fuera, porque ellos tratarán de defender lo que creen que es su territorio, pues les ha sido otorgado derecho legal por algún antepasado en la familia.
¿Quiénes se pueden beneficiar de la autoliberación?
●         Aquellos que tienen la convicción absoluta de que la liberación es el “pan de los hijos”.
●         Personas que viven en lugares apartados.
●         Líderes o creyentes que están en posiciones altas, o que no tienen dónde ir para que los ministren.
●         Creyentes que ya han sido ministrados una y otra vez con la ayuda de otra persona.
●         Aquellos creyentes que recibieron liberación, pero cayeron en tentación y le abrieron puertas al enemigo otra vez.
●         Cuando alguna otra área de la personalidad necesita mayor liberación. Para esto, la condición es que ya se haya lidiado con la raíz de ese problema en particular.
●         Los creyentes que ya recibieron liberación, pero que aún sienten que alguna opresión en particular continúa operando sobre ellos.
¿Cómo debemos prepararnos para la autoliberación?
Cuando una persona vaya a autoliberarse, debe estar completamente segura que Jesús es el Señor de su vida, su Salvador, y que ha nacido de nuevo. Otros factores importantes a tenerse en cuenta son: completo arrepentimiento de sus pecados, y que se dedique a vivir una vida pura y santa.
Hay tres grandes obstáculos que impiden que los creyentes reciban liberación o autoliberación.
●         Falta de arrepentimiento
●         Falta de perdón
●         Incredulidad o duda
¿Cuáles son los pasos para hacer una autoliberación?

1. Escriba cada problema del que usted necesita ser liberado.

Haga una lista de cosas con las cuales usted tiene una

constante lucha. Por ejemplo:

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